Mendoza tiene en promedio 700 casos semanales de coronavirus. Al menos esa es la foto de la situación epidemiológica entre la última semana de mayo y la primera de junio, siendo estable el comportamiento del virus y con un sistema de salud que no se ve afectado en la ocupación de camas, ya que el porcentaje ronda entre un 21,74% en el Gran Mendoza y de 11,54% en todo el territorio mendocino. Esta situación ameritó a la Dirección General de Escuelas a dejar sin efecto la normativa que establecía el distanciamiento social, el uso de alcohol para la higiene de manos, así como los criterios de aislamiento frente a los casos sospechosos y confirmados. Mendoza fue una de las primeras en hacer optativo el uso del barbijo en las aulas a poco del comienzo del ciclo lectivo.

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Si bien la resolución 2.265 publicada este lunes no da mayores detalles si se introducirán medidas nuevas a las que existían antes de la pandemia, se dispuso que es la subsecretaría de Educación la que tendrá que arbitrar los medios para esta nueva disposición. A través de la disposición expira la normativa implementada desde el 17 de febrero y que regía hasta la fecha.

Con pocos detalles hasta el momento, la secretaria general del Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE), Carina Sedano reclamó que en la nueva guía se contemple un aumento de presupuesto para la compra de insumos de limpieza porque el monto actual es de 3.000 por mes para todos los establecimientos, sin discriminar si hay mayor o menor matrícula.

“En lugar de pensar en el nuevo protocolo o qué cambiamos, o qué mejoramos porque Mendoza ya no usa más el tapabocas o mascarilla, hay que pensar cómo garantizamos la higiene y la salubridad en los establecimientos de la provincia”, recalcó Sedano.

“Hay que analizar cómo están las escuelas con hacinamiento, con matrícula de 30 o 40 estudiantes, la falta de bancos. No puede haber un fondo fijo de $3.000 con matrícula de 600 estudiantes. Hoy la presencialidad cuidada la garantizan los trabajadores de la educación y los celadores por la cotidianeidad que están viviendo”, puntualizó la gremialista.

El Sute volvió a hacer hincapié en lo planteado la semana pasada en paritaria no salarial y ejemplificó que hay escuelas en donde los estudiantes toman clases sentados en tachos de basura o en el piso.

“Cómo nos vamos a cuidar del Covid-19 en el caso de la escuela minera de Malargüe o la ENET de San Martín que estaban sentados en el piso tomando clases”, disparó la docente.

Compra de mobilario

En tanto, este martes 14 de junio se realizará la apertura de la licitación para la compra de 7.500 bancos unipersonales con silla, 800 sillas de primer grado y 300 mesas de primer grado, 250 sillas y 150 escritorios para docentes, 150 armarios, 120 bancos, 100 pupitres universitarios, 60 mesones y 150 pizarrones.

De acuerdo con lo informado por el gobierno escolar se retomará la compra de mobiliario que había quedado en pausa durante la pandemia de Covid-19.

Atendiendo las necesidades de las escuelas con mayor matrícula, el 60% de las nuevas adquisiciones irán al Gran Mendoza.

Con esta acción, la provincia aseguró que se dará una solución a los trastornos de la falta de sillas y de bancos para después del receso invernal.

Plenario Provincial

Luego de la discusión en los plenarios en las escuelas y en el departamento que se desarrolló este lunes, este martes tendrá lugar la convocatoria a los delegados y a las bases al general en San Carlos.

De allí surgirá un plan de lucha frente a las demandas de dar solución a los problemas de mobiliario en las escuelas, el mantenimiento de las estufas y adelantar la apertura de las paritarias antes de septiembre.

“Nosotros estamos dispuestos a dialogar con el Gobierno, pero seguimos sin ser escuchados”, insistió la dirigente que lleva algunos meses al frente del sindicato.

También destacó que a nivel nacional ya se reabrieron las instancias de revisión y de actualización por la crítica situación de la inflación y la pérdida de valor adquisitivo.

A comienzos de año, el SUTE publicó una carta abierta al gobernador Rodolfo Suárez en donde se pedía una reunión urgente antes del inicio del ciclo lectivo para revisar la situación edilicia de las escuelas y las condiciones para la presencialidad cuidada.