Relaciones Románticas

Las relaciones románticas es uno de los temas de la vida donde solemos ver con menor claridad. La idea del alma gemela que nos complete, salvándonos de la soledad y de una existencia sin sentido, es un mito casi omnipresente en nuestra sociedad.

Al comenzar a experimentar la plenitud interior, uno de los cambios más significativos es que perdemos la necesidad de que otra persona nos complete. Necesitar a otro es una vía segura hacia el sufrimiento. Tal vez al principio sintamos que estar junto a nuestra pareja es suficiente, pero al poco tiempo empezamos a querer que sea de cierta manera, para nosotros sentirnos satisfechos; necesitamos que se modifique a sí mismo, al menos a veces, para poder cumplir con nuestras expectativas. Y en el momento en que alguien se tiene que modificar para complacer a otro, está abandonándose a sí mismo. De modo que una relación basada en la necesidad de otro, exige el auto-abandono y es, por naturaleza, condicional.

El amor condicional consiste en tomar del otro. La tarea de mi pareja es hacerme sentir bien y la mía es decirle cómo lograrlo. En este tipo de relaciones solemos armar una larga lista, generalmente imposible de cumplir, que nuestra pareja debe realizar para poder demostrar que nos ama. Pero, aun cuando el otro logre cumplir con todos nuestros requisitos, no tardaremos en confeccionar una nueva lista de requerimientos y condiciones.

El amor verdadero es incondicional. Abraza sin necesidad ni expectativas, se deleita en la mariposa sin desear clavarla y enmarcarla. Considera el encanto impredecible y efímero de su vuelo como parte intrínseca de su belleza.

Ésta es la actitud más saludable con la que podemos abordar una relación romántica y, de hecho, la vida en general: disfrutarla mientras dure. En cuanto queremos poseer algo, su belleza comienza a desvanecerse. Cuando nos aferramos a nuestros placeres, terminamos sofocándolos.

La única manera de realmente lograr ese amor desapegado, es encontrando nuestra  plenitud interior; hasta entonces, podemos fingir indiferencia, pero nuestro bienestar estará inexorablemente atado al comportamiento de nuestra pareja y condicionado por la necesidad de devoción hacia nosotros.

Así que, a través de nuestra transformación interior, la idea de nuestra “media naranja” ciertamente desaparecerá. Esto no quiere decir que nos vamos a volver amargados y cínicos, sino todo lo contrario: simplemente significa que hemos alcanzado la completitud.

Ya sin las expectativas de ser salvados por otro, estamos abiertos a compartir nuestra plenitud recién descubierta con todos los que conocemos, libres del miedo a la pérdida. Esta es la clase de amor más dichoso y jubiloso. Y como no depende de otro sino que yace dentro de nosotros mismos, nos acompaña a todas partes, impregnando todas nuestras relaciones.

A través de la transformación interior, nuestras relaciones se tornan más libres y más transparentes. No imponemos condiciones rígidas el uno sobre el otro, ni tampoco tenemos expectativas de lo que el futuro traerá consigo.

El compromiso en una relación es algo maravilloso, siempre y cuando venga desde la dicha de dar y la disposición a encarar lo bueno y lo malo juntos.

ISHA, maestra espiritual y autora de POR QUE CAMINAR SI PUEDES VOLAR entre otros, y su último título LA VIBRACIÓN DEL AMOR, te invita a cultivar esta experiencia y acercarte a tu autorrealización a través de los simples pasos de su sistema.  En estas vacaciones de invierno realizará actividades en el Centro Isha Uruguay www.isha.com o conéctate info@isha.com