Carina Chacón: “Lo que menos quería era abandonar en una ambulancia”

"Jamás abandonar", es su lema. Carina Chacón, atleta de 48 años, volvió del Mundial de Ironman 70.3 que se desarrolló en Niza, Francia. La triatlonista del club Mendoza de Regatas tuvo su experiencia más exigente, puso su físico a prueba y después de dudar en seguir durante la carrera, sacó fuerzas para seguir convencida de 'nunca papar'.

Este Ironman 70.3 Half, que fue la modalidad de la mendocina, la cual comprendió 1,900 km nadando, 90 km pedaleando y 21,097 corriendo.

Carina contó que su etapa más difícil fue la pendiente en ciclismo donde un calambre casi la subió a una ambulancia. Pero "lo que menos quería era abandonar y menos en una ambulancia".

"La carrera fue muy dura, tenía una subida intensa, como los caracoles de Potrerillos. Al final de la subida me acalambré las dos piernas y no me podía mover del dolor. No había banquinas y me paré. Lo árbitros que andaban en moto, se pararon atrás y me pidieron que me corriera. Cuando me quisieron llamar la ambulancia, reinicié y empecé a pedalear de nuevo alternando las piernas porque no quería bajarme de la competencia. Si bien paré varias veces después, pude llegar. Lo que menos quería era abandonar y menos en una ambulancia. Saque fuerzas de donde no tenía", confió la mendocina.

Y agregó: "Yo venía con una lesión en el isquiotibial, cuando llegué a la parte del trote me volví a acalambrar. Vino una persona de la organización, me tiró al pasto y me elongó. Y seguí corriendo. Sufrí mucho esta carrera. No la disfruté, no me sentí bien, no la disfruté y me sentí distinta", confesó Carina.

En cuanto a sus expectativas, sus "tiempos no se cumplieron. Nunca paro en los 21 km, ni para tomar agua, y sostengo el ritmo. En esta competencia paré en todos los puestos de agua y me tomé todo lo que había. Estaba realmente agobiada, nunca me había pasado algo igual. Pero fue importantísimo resistir y hacer todo lo posible porque quería llegar a la meta. Lo logré y sobre todo porque allí me estaba esperando mi hermano y mis sobrinos en la llegada. Fue lindo que me vieran llegar corriendo. Eso fue para mi lo más importante".

La atleta hacía 40 años que no veía a su hermano y esta carrera significó el reencuentro con Rafael, y sus sobrinos Gabriel y Sebastián, quienes viven en Escocia y fueron especialmente para ver a Carina competir.

-¿Qué es lo positivo que sacás de esta experiencia?

-Me sentí orgullosa estar representando a mi provincia. Pero también me di cuenta que en el deporte estamos muy lejos de las grandes potencias en cuanto a costos, nosotros hacemos todo a pulmón. Estamos muy lejos de los europeos en cuanto a materiales, el alcance de la tecnología, estructura de entrenamientos y elementos de competencia. En Argentina, a la mayoría de aquello no tenemos acceso. Lo positivo de esta experiencia es conocer otro nivel en este deporte, como se mueven, la organización que tienen y conocer otros deportistas de muchos lugares fue muy lindo también.

Fueron alrededor de 5.740 personas en competencia y hubo una multitud que abandonó. Carina, no lo hizo, fiel a su convicción.

Finalmente, Chacón hizo su balance y analizó: "Siento que lo que me faltó fue concentración y una preparación previa más profesional sobre todo en cuanto a lo físico y nutricional. No fue una carrera más, fue durísima, no es para cualquiera. Hubo mucha gente que abandonó y creo que tendría que haber tomado esta competencia mucho más en serio", concluyó.

Carina tendrá de ahora en más otra perspectiva con respecto al triatlón. Mientras tanto continuará su preparación con el triatlón de cara a nuevos desafíos locales, nacionales e internacionales.