En Mendoza 6.119 hogares no tienen inodoro, según datos del Censo 2022. En pleno siglo XXI hay quienes aún transitan su vida diaria sin este recurso que para el resto de la sociedad es algo esencial y tan natural tener.
En Argentina, viven en estas condiciones 6 millones de personas. La falta de este elemento básico genera múltiples desafíos en materia de salud y dignidad.
En Mendoza 6.119 hogares no tienen inodoro, según datos del Censo 2022. En pleno siglo XXI hay quienes aún transitan su vida diaria sin este recurso que para el resto de la sociedad es algo esencial y tan natural tener.
No es un tema menor. En Argentina, más de 6 millones de personas no tienen inodoro en sus hogares, una carencia que impacta directamente en la salud, el ambiente y la dignidad. El inodoro debidamente conectado a la red de saneamiento es de vital importancia para prevenir enfermedades y proteger el medio ambiente, entre otros innumerables beneficios.
Cada 19 de noviembre, el mundo conmemora el Día Internacional del Inodoro, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas para visibilizar una realidad que aún afecta a millones de personas: la falta de acceso a servicios de saneamiento adecuados. El inodoro, debidamente conectado a una red de saneamiento, es mucho más que un artefacto cotidiano: representa una de las innovaciones más trascendentes en la historia de la salud pública. Su incorporación en la vida diaria permitió reducir enfermedades, mejorar la higiene y construir entornos urbanos más seguros.
Aunque la mayoría de los argentinos cuenta con inodoro y conexión a red, la falta de infraestructura sigue afectando a millones de personas, especialmente en zonas rurales y en asentamientos urbanos informales. En esos contextos, la inexistencia de servicios de saneamiento adecuado no solo vulnera derechos básicos, sino que también agrava los riesgos sanitarios y ambientales. El tema vincula salud, infraestructura y justicia social.
Cada 19 de noviembre, el mundo conmemora el Día Internacional del Inodoro
“La falta de inodoros y servicios adecuados de saneamiento provoca graves problemas de salud, como la propagación de enfermedades infecciosas y diarreas, que siguen siendo una de las principales causas de muerte en niños menores de cinco años. El acceso a un inodoro limpio y seguro también está vinculado con otros derechos humanos fundamentales, como el acceso al agua potable, la salud, y la seguridad de mujeres y niñas, quienes son particularmente vulnerables cuando no existen instalaciones privadas”, explicó Sandra Pérez, gerente de Producto LATAM de Amanco Wavin, compañía que se suma a la conmemoración con una campaña de concientización sobre el valor del saneamiento básico y que elaboró un informe al respecto.“El uso del inodoro y los sistemas de saneamiento adecuados son clave para el desarrollo sostenible y la salud de las comunidades. No es solo una comodidad moderna, sino una herramienta esencial para la salud, la seguridad, el desarrollo y la dignidad de las personas”, agregó Pérez.
Contar con un sistema de saneamiento eficiente ofrece múltiples beneficios: