30 de octubre de 2025 - 20:10

Las verduras de hoja verde se mantendrán frescas y sin bacterias si las desinfecta de forma correcta

Enjuagar las verduras bajo el agua no es suficiente. Por eso, existen pasos clave que si se pasan por alto pueden permitir que los microorganismos permanezcan.

Al preparar ensaladas o verduras crudas, el lavado es un paso crucial que muchas veces se realiza de manera rápida e incompleta. Las hojas pueden traer tierra, restos del suelo y bacterias que no se eliminan solo con un chorrito de agua. La forma en la que se manipula cada pieza antes de servirla influye en la higiene.

Además, hay un error común que puede arruinar la verdura y favorecer la aparición de moho y humedad: lavarlas apenas llegan de la verdulería y guardarlas húmedas en la heladera. Esta práctica puede potenciar el crecimiento de bacterias en lugar de reducirlas. Entender cuáles son los pasos recomendados ayuda a mantener los alimentos frescos y seguros para el consumo.

limpieza de verduras
La clave de limpiar las verduras correctamente está en la constancia y en conocer cómo tratar cada tipo de según su superficie y textura.

La clave de limpiar las verduras correctamente está en la constancia y en conocer cómo tratar cada tipo de según su superficie y textura.

Cuál es la forma correcta de lavar las verduras para evitar bacterias

Las verduras, sobre todo las de hoja verde como la lechuga, espinaca, rúcula o acelga tienen muchas superficies, pliegues y capas donde puede acumularse suciedad invisible.

  • Para lavarlas de manera segura, se recomienda retirar las hojas externas dañadas o marchitas antes de empezar.
  • Luego, separar hoja por hoja y colocarlas en un recipiente grande con agua limpia. En este punto, es importante moverlas suavemente con las manos para que los restos sedimentados se desprendan y queden en el fondo del recipiente.
  • Después de esto, se deben enjuagar nuevamente bajo agua corriente para retirar cualquier suciedad que haya quedado.
  • Un detalle clave es no lavarlas antes de guardarlas. Si se guardan mojadas, la humedad se concentra entre las hojas y acelera la descomposición, además de favorecer la proliferación bacteriana. Por eso, lo ideal es lavarlas solamente antes de consumirlas y, si se necesita conservarlas ya limpias, asegurarse de secarlas muy bien con un paño limpio o una centrifugadora de verduras en un caso extremo.

En el caso que se desee desinfectar aún más, se puede agregar una cucharadita de vinagre blanco por litro de agua en el primer lavado, dejar reposar unos minutos y luego enjuagar. El vinagre ayuda a reducir la presencia de determinados microorganismos sin dejar sabores fuertes.

limpieza de verduras
La clave de limpiar las verduras correctamente está en la constancia y en conocer cómo tratar cada tipo de según su superficie y textura.

La clave de limpiar las verduras correctamente está en la constancia y en conocer cómo tratar cada tipo de según su superficie y textura.

Las demás verduras también necesitan un lavado cuidadoso

No solo las hojas verdes deben lavarse de manera cuidadosa. Verduras como tomates, pepinos, pimientos, zanahorias y zapallitos también acumulan microorganismos en su superficie.

  • En verduras o frutas con cáscara gruesa, como papas o calabazas, la recomendación es lavarlas antes de pelarlas. Esto evita que la suciedad de la superficie pase al interior cuando se corta con un cuchillo.
  • En verduras de cáscara más firme, se recomienda usar un cepillo limpio destinado exclusivamente para alimentos. Esto ayuda a remover partículas invisibles adheridas.
  • En el caso de verduras de raíz como la zanahoria o la remolacha, el cepillado es especialmente útil ya que suelen contener restos de tierra.
  • Para el tomate o el pepino, solo hay que frotarlos suavemente bajo el agua sin detergente, ya que los jabones no son aptos para el consumo y pueden quedar en la superficie.
  • Por último, las hojas de apio y los repollos pueden contener capas internas que también se deben revisar. Por eso, quitar la primera capa del repollo antes de lavar es fundamental.
limpieza de verduras
La clave de limpiar las verduras correctamente está en la constancia y en conocer cómo tratar cada tipo de según su superficie y textura.

La clave de limpiar las verduras correctamente está en la constancia y en conocer cómo tratar cada tipo de según su superficie y textura.

Cada tipo de verduras tiene superficies distintas y por lo tanto necesita una manipulación diferente. Lo más importante es realizar el lavado justo antes de consumir y asegurarse de que el agua sea potable. Solo son hábitos sencillos pero que pueden marcar la diferencia a la hora de alimentarse. Por eso, dedicarle unos minutos a este proceso mejora la calidad de lo que se consume.

LAS MAS LEIDAS