Hay recetas que te sacan de cualquier apuro, sin caer en comidas rápidas o poco saludables. Ese es el caso de la tortilla de zanahoria es una alternativa liviana, colorida y muy versátil que podés preparar en minutos con lo que tengas en casa.
Esta tortilla de zanahoria es una prueba de que lo simple puede ser delicioso y es perfecta para esos días sin tiempo, en en los que necesitas resolver.
Hay recetas que te sacan de cualquier apuro, sin caer en comidas rápidas o poco saludables. Ese es el caso de la tortilla de zanahoria es una alternativa liviana, colorida y muy versátil que podés preparar en minutos con lo que tengas en casa.
Para prepararla no necesitás más que una zanahoria, un huevo y un toque de condimentos, aunque podés sumar el relleno que más te guste para hacerla más completa.
Además de ser una receta práctica, tiene ese plus de que podés aprovechar esos ingredientes simples que casi siempre están en la heladera. Y si estás buscando cuidar tu alimentación o comer más verduras sin complicarte, este plato es ideal porque es bajo en calorías, rico en fibra y con una textura tierna que la hace irresistible.
Lo mejor es que se puede adaptar a cualquier momento del día, ya sea un almuerzo, cena o incluso una vianda para el trabajo. La zanahoria rallada le da ese sabor dulce y suave que combina perfecto con pollo, queso, jamón o rúcula.
También podés probar con atún, vegetales salteados o un toque de palta para darle una vuelta diferente. Lo bueno de esta receta es que no tiene harinas, así que es apta para quienes siguen una alimentación sin gluten o simplemente buscan comidas más livianas.