Cornejo dice que la plata de Portezuelo puede ir a “muchas empresas”

En un encuentro con empresarios pyme de la construcción, el candidato a gobernador afirmó que los U$S 1023 millones, repartidos entre varios privados que realicen obras, pueden dinamizar el empleo.

Cornejo diserto ante los empresarios pyme de Cecim.
Cornejo diserto ante los empresarios pyme de Cecim.

Alfredo Cornejo habló este jueves ante empresarios pyme de la construcción sobre el destino que tendrán, si es elegido gobernador, los 1.023 millones de dólares que envía el Gobierno nacional y que originalmente iban a ser utilizados en la construcción del dique Portezuelo del Viento.

El millonario resarcimiento por la promoción industrial es una de las grandes inquietudes de los empresarios de la construcción. “Queremos emplearlos en licitaciones que tengan que ver con el cuidado y la eficiencia del agua vinculadas a la agroindustria”, les contó el candidato de Cambia Mendoza.

“Ellos, entre otros, pueden ser proveedores de proyectos pequeños y más grandes”, avisó Cornejo en el contexto de las pymes. E insistió: “Pueden hacer un aporte sustantivo, ese financiamiento existe”.

Las declaraciones de Cornejo se produjeron en el contexto de una charla con los dirigentes de Cecim (Cámara de Empresas de la Construcción Independientes de Mendoza). Cornejo y parte de su equipo dialogaron sobre los planes futuros con respecto a la obra pública y los famosos 1023 millones de dólares.

Antes de que tomara la palabra Cornejo, Dalmiro Barbeito, presidente de Cecim, afirmó que el sector se está adaptando “a los distintos vaivenes de la economía argentina” y avisó: “Las empresas que integran esta institución estamos preparadas para los desafíos que la política tenga en materia de inversión pública”.

“Las pymes constructoras somos partícipes activas de la obra pública y privada que se ejecuta en la provincia. Más del 70 por ciento de los trabajadores registrados en el área de la construcción pertenecen a empresas integrantes de Cecim”, dijo Barbeito en su introducción y agregó: “el 80 por ciento de las escuelas que se hacen en Mendoza son obras ejecutadas por empresas de nuestra cámara. Lo mismo ocurre en viviendas, infraestructura municipal y en todas las obras que el Estado ejecuta y planifica desde hace más de 20 años”.

En algunos discursos anteriores, Barbeito había dejado ver en forma explícita la inquietud del sector por la inmovilidad de los fondos de Portezuelo. Y en este sentido, recibió algunas respuestas.

“Mi percepción es que no se está dimensionando claramente cuánto es 1.023 millones de dólares. Es muchísimo más de lo que se invierte en cuatro años en un gobierno. Si se ve la inversión pública de los últimos cuatro años es bastante más. Y esos millones repartidos entre muchas empresas pueden tener una dinamización”, afirmó Cornejo.

También expresó que “si invirtiéramos 300 millones de dólares por año, algunas empresas no alcanzarían a dar abasto con el personal que tienen, con lo cual mejoraría la capacidad también de personal y demás”.

Cornejo también recalcó que los fondos de compensación por la promoción industrial están en “dólar billete” y que por ello “no se desvalorizan” como la moneda nacional.

Sin embargo, indicó que “si la inflación no se detiene en el primer año, vamos a seguir teniendo los mismos problemas actuales”. Razonó que el Gobierno puede “jugar con las redeterminaciones de precio en una primera etapa de inflación, pero no puede sostenerse los cuatro años”.

El candidato a gobernador de Cambia Mendoza no habló sobre El Baqueano, el proyecto hídrico que asomaba como “plan B” para el uso de los fondos de Portezuelo. O más bien, parte de ellos, ya que para hacerlo hace falta alrededor de la mitad de los 1.023 millones de dólares que en octubre del año que viene se reunirán en un fideicomiso (la Nación no ha terminado de liquidar las cuotas y a esta altura ya hay 866 millones).

De todos modos, Cornejo ya se refirió a El Baqueano al participar en San Rafael de la audiencia pública sobre el proyecto. Mencionó en este sentido que, en caso de resultar electo gobernador, se comprometerá con esta obra.

No obstante, en aquella ocasión, aclaró que su objetivo será “que participe el sector privado” y que “no sea solo el sector público el que tome riesgo por una obra que será beneficiosa para todos y en especial para la industria”.

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