Acerca de “El Unicipio”: ¿Somos ciudadanos metropolitanos?

La organización metropolitana nos sirve para abordar un camino multivariable que garantice la sostenibilidad de la urbe entendida como conjunto con su propio ecosistema urbano saludable

Graciela Marty, coordinadora de Unicipio.
Graciela Marty, coordinadora de Unicipio.

Todos los que habitamos en los municipios de Ciudad de Mendoza, Godoy Cruz, Las Heras, Guaymallén, Lavalle, Maipú y Luján de Cuyo somos ciudadanos metropolitanos y estamos íntimamente interconectados: vivimos en un municipio, vamos a trabajar a otro, llevamos a los chicos a la escuela a otro, nuestros padres viven en otro, salimos a divertirnos a otro… El continuo urbano no nos permite dilucidar a simple vista la “frontera” entre un municipio y otro… Eso es lo que nos convierte en ciudadanos metropolitanos y nos manejamos dentro de una lógica metropolitana sin saberlo.

El abordaje metropolitano de la realidad es tan fáctico como necesario. Las variables económicas, comerciales, ambientales, sociales o culturales se mueven y se organizan a través de una dinámica metropolitana. Sin embargo y marcando una gran contradicción, en nuestro país hay muy pocos entes metropolitanos conformados…

Unicipio, el ente metropolitano de Mendoza que existe desde 2016, ha emprendido varios proyectos referidos a distintos aspectos de la vida social. Algunos ya están finalizados, otros en fase de planificación y otros en plena ejecución, como es el caso de la Red de Ciclovías Metropolitanas, el proyecto para preservar el arbolado público o el Parque Costero.

La red de ciclovías que se está ejecutando entre los siete municipios, ha sido planificada minuciosamente por el Unicipio, junto con cada intendencia, asesorados por expertos en el tema con el fin de interconectar de manera lógica, coherente y sin mayores desvíos los territorios municipales entre sí. Por ejemplo, una vez terminada la obra, seguro el ciclista llegará más rápido a su meta que el automovilista, porque en las ciclovías no hay embotellamientos ni atascos.

Hoy en día hacer ciclovías se ha convertido en una política de estado. Todos los colores políticos apoyan su construcción y apuestan por la infraestructura verde, no sólo porque andar en bicicleta baja las emisiones de efecto invernadero y mitiga el cambio climático, sino también porque beneficia la salud y el bolsillo de los ciudadanos. En camino se encuentran los instructivos de seguridad vial y convivencia entre peatones, ciclistas, motos y coches. Cuando se termine de ejecutar el proyecto de Unicipio, Mendoza tendrá la red de ciclovías metropolitanas más extensa del interior del país y los ciclistas en vez de multiplicarse por 10 como lo han hecho hasta ahora, se multiplicarán de manera exponencial, como sucede en otras ciudades de Latinoamérica y el resto del mundo.

Algunos vecinos sostienen que las ciclovías son incómodas porque se pierden lugares para estacionar, sin embargo, a la larga le otorgan un plus valor a las propiedades de esa calle. Para otros vecinos lo incómodo son los árboles, porque incrustan sus raíces debajo de sus casas buscando agua o pierden ramas con el viento… sin embargo, los árboles son nuestros aliados incondicionales si queremos subsistir en esta Mendoza cada vez más desértica. También en su momento fue muy incómodo para los fumadores salir a fumar afuera, pero hoy en día se ha convertido en algo natural e incuestionable.

La organización metropolitana nos sirve para abordar un camino multivariable que garantice la sostenibilidad de la urbe entendida como conjunto con su propio ecosistema urbano saludable. No basta con desear “ser sostenible”, muchas veces hay que tomar algunas medidas incómodas para tener un futuro como ciudad o para crear la ciudad del futuro.

* La autora es Coordinadora provincial de Unicipio.

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