En su primera participación en las ceremonias del Jubileo del Año Santo 2025, el papa León XIV celebró una multitudinaria misa en la Plaza de San Pedro dedicada a las familias, donde defendió el matrimonio entre un hombre y una mujer como “el modelo del verdadero amor” y cuestionó a quienes invocan la "libertad para quitar la vida", en una clara referencia al aborto.
Qué dijo el papa León XIV
“Con el corazón lleno de gratitud y esperanza, a ustedes esposos les digo: el matrimonio no es un ideal, sino el modelo del verdadero amor entre el hombre y la mujer: amor total, fiel y fecundo”, afirmó el pontífice durante la homilía, en una celebración centrada en niños, abuelos y ancianos, en el corazón de la Ciudad del Vaticano.
Miles de familias de todo el mundo colmaron la plaza, que lucía carteles con consignas como “Papa León protege la familia”. Fue el primer acto público del nuevo Papa en el marco del Jubileo, tras el fallecimiento de su antecesor, Francisco, ocurrido el pasado 21 de abril.
Ante miles de fieles el papa León XIV defendió el matrimonio tradicional y criticó el aborto
El papa León XIV hoy ante miles de personas en la Plaza de San Pedro
EFE
"Al proponernos como testigos ejemplares a matrimonios santos, la Iglesia nos dice que el mundo de hoy necesita la alianza conyugal para conocer y acoger el amor de Dios, y para superar, con su fuerza que une y reconcilia, las fuerzas que destruyen las relaciones y las sociedades", aseveró.
“Hermanos, si nos amamos así, sobre el fundamento de Cristo, seremos un signo de paz para todos en la sociedad y en el mundo”, sostuvo León XIV y sumó: "No hay que olvidar que del seno de las familias nace el futuro de los pueblos”.
Luego lamento que “a veces esta humanidad se ve traicionada” cuando no se protege la vida. "Es cierto que, a veces, esta humanidad se ve traicionada. Por ejemplo, cuando se invoca la libertad no para dar vida, sino para quitarla; no para proteger, sino para herir. Sin embargo, incluso frente al mal que divide y mata, Jesús sigue orando al Padre por nosotros", alegó.
Durante la oración del Regina Coeli, el Papa también recordó a las familias afectadas por los conflictos en Medio Oriente y Ucrania, y anunció la beatificación de 15 religiosas polacas de la Congregación de Santa Catalina, asesinadas por el Ejército soviético en 1945, a quienes calificó como mártires de la fe.
“El contexto estuvo caracterizado por la expansión de la ideología atea y comunista, que se oponía a la Iglesia católica, a sus estructuras y representantes”, explicó.
Para su defensa de la familia, citó algunas parejas y familias que han subido a los altares conjuntamente en las últimas décadas, como los padres de santa Teresa del Niño Jesús, Luis y Celia Martin, beatificados en 2008, o la familia polaca de los Ulma, asesinados por haber protegido judíos en la II Guerra Mundial.