Con la “Guerra” sin definición

La primera “batalla”terminó en tablas. Y ahora todo se definirá en el General San Martín.

La cita era en San Juan ante Peñarol, y con un golazo de Matías Guerra Huracán sacaba medio pasaje a semifinales, pero el local empató la historia sobre el final y dejó abierta la serie.

El mérito de haberse ido en ganador al descanso radica en la madurez con que el Globo laburó la primera mitad.

Porque aunque el rival mostró alguna intención ofensiva en el arranque, cuando la visita encontró el dial para comenzar a jugar el encuentro, se jugó bien lejos de Agüero.

Apenas se cuenta un cabezazo a quemarropa de Brizuela que tapó el “1” lasherino. Después fue más el visitante, con Martín recordando la importancia de un volante central de sus características.

Arriba, los Luceros, Emanuel y Cristian, acompañados de un Aguilar que cada día juega mejor, encontraron espacios para moverse sobre el costado derecho.

Y antes del gol de Guerra, casi sobre el cierre de la etapa, Emanuel tuvo dos claras ocasiones que no pudo transformar en gol. Hubo lucha y fricción en el mediocampo. El poco fútbol que se vio surgió de los pies mendocinos.

Y desde la infinita seguridad que entregan Barrera y Tallura como centrales, el Globo bancó casi sin despeinarse a un rival sin peso ofensivo y sin creatividad.

Con la obligación de ir a buscarlo, Peñarol fue mucho más desde la actitud en el complemento. Sin demasiado fútbol pero con mucha entrega y personalidad, mientras que Huracán LH retrocedió demasiado en el campo.

El local generó clarísimas chances que una a una fueron siendo desactivadas por Agüero, la gran figura del encuentro. Parecía que el guardameta era inexpugnable para el dueño de casa, pero...

Todo cambió en el epílogo cuando se festejaba la victoria.  De tanto ir, el Bohemio tuvo su premio tras una doble atajada del “1” visitante y la aparición de Brizuela para calmar los ánimos.

Merecido por la decisión de Huracán LH de retroceder tanto en el complemento. Así, dejó pasar una gran chance de llevarse medio ticket en el bolsillo y pensar con más certezas en el ascenso.