Doce años sin Mercedes Sosa: su amor por Mendoza y el lugar donde fueron esparcidas sus cenizas

“Porque no es lo mismo que vivir, honrar la vida”. Lo escribió la cantante y compositora argentina Eladia Blázquez; lo popularizó Mercedes Sosa, la brillante y legendaria Cantora. Pero no solamente lo cantó -¡y cómo!-, sino que cumplió con esta máxima en vida, y lo hizo con creces. Porque, con sus actos, La Negra honró la vida, aquella misma vida que se apagó un 4 de octubre de 2009, cuando Sosa tenía 74 años y precisamente una fecha de la que este lunes se cumplen 12 años.

Una multitud despidió a Mercedes Sosa en el Congreso de la Nación durante las 22 horas en que se extendió el velatorio de la artista tucumana entre el domingo 4 y el lunes 5 de octubre de 2009. Luego sus restos fueron cremados en el cementerio de la Chacarita, mientras que las cenizas fueron esparcidas en tres lugares que fueron cruciales en la vida y obra de Mercedes: en Tucumán, su tierra natal, en Mendoza, más precisamente en el canal Cacique Guaymallén, y en Buenos Aires. Los tres destinos habían sido elegidos por Sosa mientras estuvo viva, por lo que todo se respetó en cumplimiento a una de las voluntades de la Negra.

Porque Mendoza marcó la vida de Mercedes, y Mercedes marcó la historia de Mendoza. En esta provincia, la Negra encontró a su amor y padre de su hijo, Oscar Matus, pero también dejó su invaluable huella desde lo artístico al ser parte fundamental del Nuevo Cancionero Popular junto a otro inolvidable referente del arte local, Armando Tejada Gómez.

Mercedes Sosa, por siempre en Mendoza

Quince días después de la muerte de Mercedes, el 19 de octubre de 2009, su hijo Fabián Matus llegó a Mendoza para esparcir parte de sus cenizas en el canal Cacique Guaymallén. Fue él, hijo de Mercedes y del mendocino Oscar Matus, quien confesó que era voluntad de su propia madre que parte de su ser descansara en la provincia a la que tanto quiso y donde fue concebido el propio Fabián, quien falleció en marzo del 2019. El resto de las cenizas fueron esparcidas entre Tucumán y Buenos Aires.

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“La mami (por Mercedes Sosa) será trasladada al crematorio de Chacarita y sus cenizas serán esparcidas en su momento en tierras de Tucumán, donde nació; en Mendoza, porque fue donde se afianzó el movimiento de la nueva canción; y en Buenos Aires, donde vivió desde los años sesenta”, explicó oportunamente su hijo en los instantes posteriores a su funeral.

Aunque nació en Buenos Aires, Matus también se contagió de su madre y heredó de ella ese amor incondicional por Mendoza. En agosto de 2011, cuando Fabián regresó a la provincia para filmar parte del documental Mercedes Sosa, la voz de Latinoamérica sobre la vida de su madre, repasó las vivencias de Mercedes y lo que recordaba él mismo de su infancia aquí. “Un momento feliz que recuerdo de mamá, uno de los más plenos, era cada vez que veníamos a Mendoza y cruzábamos el Cóndor por la ruta (Acceso Este). Ahí cambiaba la cosa, se la veía muy contenta. La pena era cuando lo volvíamos a pasar, esta vez para irnos”, explicó a Los Andes hace diez años.

Mercedes Sosa y el Nuevo Cancionero

Mercedes Sosa llegó por primera vez a Mendoza a mediados de la década de 1950. Sin embargo, fue en 1963 cuando fue concebido y presentado el histórico manifiesto del Nuevo Cancionero Popular. Este histórico hito tuvo como escenario el Círculo de Periodistas de Mendoza.

“El manifiesto del cancionero popular nació aquí mismo, en el Círculo de Periodistas, y cuenta con el aporte de muchos personajes de la cultura de la época. Siempre es nuevo, porque el autor nace todos los días, el verdadero autor es el pueblo. El cantor lo único que hace es interpretar al pueblo y pasarlo al pentagrama, el cancionero se va renovando constantemente”, destacó en 2011 -mientras era entrevistado por Matus para el documental- José “Pepe” Segovia, quien se desempeñaba como cantinero del Club de Música de Mendoza, ubicado en calle Rioja (frente a Radio Libertador) y quien era amigo de la infancia de Oscar Matus y de Tejada Gómez.

El 11 de febrero de 1963, ante una multitud de gente y en un clima de rebosante hermandad -comparable quizás con el descripto en la Canción con Todos, de Tejada Gómez y César Isella-, Oscar Matus, Mercedes Sosa, Armando Tejada Gómez y Tito Francia (entre otros) presentaron el manifiesto en la sede del Círculo en calle Godoy Cruz, donde desde hacía siete años se celebraban todos los sábados peñas en las que no faltaba ninguno de los artistas.

“Yo era amigo de la infancia de Armando (Tejada Gómez) y llevaba permanentemente con él una carpeta donde tenía el original. Un día se reunió conmigo y me dijo que quería dejármelo a mí, porque él la llevaba permanentemente y temía que se le pudiese llegar a perder”, recordó Segovia en aquella entrevista con Los Andes de 2011. Próximo a cumplir 82 años, en aquel momento el propio Segovia tenía consigo -y atesoraba- el documento original con anotaciones de puño y letra del propio Tejada Gómez.

“Por él (Tejada Gómez) había conocido al Negro (Matus). Una de las veces que se habían ido, a fines de los ‘50, cuando volvieron llegaron con Mercedes cargada al hombro. ¡Y qué carga, qué personaje, qué voz!”, recordó entre risas y con melancolía Pepe, quién se dio el lujo hasta de jugar al truco con Atahualpa Yupanqui como compañero ocasional en una de esas noches en la cantina de calle Rioja durante una de las reuniones con los ideadores del Nuevo Cancionero.