La coordinadora del Ministerio Público Fiscal, Teresa Day, participa de la audiencia pública no vinculante, en la antesala de la sesión de acuerdos del próximo martes, en el que el Senado votará de forma secreta su pliego para ocupar un lugar como ministra de la Suprema Corte.

De las 4.675 presentaciones que ingresaron en la mesa de entradas del Senado, 4.302 fueron a favor y 373 en contra.

La audiencia se realiza por primera vez de manera virtual, mediante un protocolo en base al combate de la pandemia del coronavirus.

En paralelo, Day ha sido objetada por la oposición, quien presentó una medida cautelar y un pedido de Declaración de Certeza, para que la Corte interprete si cumple o no los requisitos que marca la Constitución.

Puntualmente la oposición se refiere al artículo 152, inciso 3 de la Constitución, que expresa que para ser miembro se necesita “ser abogado con título de universidad nacional y con 10 años de ejercicio de la profesión u 8 de magistratura”. Teresa Day se recibió en 1995, hace 30 años trabaja en el Poder Judicial pero la oposición duda de si expresa y técnicamente ejerció su profesión.

El radicalismo sostiene que el planteo opositor “no resiste ningún tipo de análisis” y que incluso ir a la audiencia de conciliación sería “dar lugar” en cierto sentido al planteo. Es por eso que Mario Abed, vicegobernador y presidente de la Cámara Alta, no irá. Además, se amparan en el artículo 12 de la Constitución, que marca que “el gobierno de la Provincia será dividido en tres poderes distintos: Legislativo, Ejecutivo y Judicial”; y que “ninguno de éstos podrá arrogarse, bajo pena de nulidad, facultades que no le estén deferidas por esta Constitución, ni delegar las que le correspondan”.

A favor y en contra

Más de 30 personas expusieron a través de streaming sus adhesiones e impugnaciones. Entre las adhesiones estuvieron el radical Fernando Armagnague, el ex juez penal Jorge Coussirat, la responsable de la Dirección de la Mujer y Género en la Justicia, Stella Spezia; y el procurador de la Corte, Alejandro Gullé, entre otros. En tanto, en contra se manifestaron el dirigente sindical Gustavo Correa; el presidente del PJ, Guillermo Carmona; el abogado, Alfredo Guevara; y la principal referente de la organización Tupac Amaru, Nélida Rojas.

Las adhesiones tuvieron que ver en reafirmar la idoneidad para ocupar el cargo, su función dentro de la Justicia y además de amparar los requisitos que necesita para ocupar el cargo de ministra de la Suprema Corte. En tanto, las impugnaciones se centraron en las dudas respecto a si cumple dichos requisitos; además de expresar que habría una pérdida de imparcialidad e independencia de la Justicia con su posible acceso al máximo tribunal.