Es una semana incómoda la que atraviesa el gobernador Alfredo Cornejo como flamante aliado de La Libertad Avanza. El escándalo que envuelve a la Casa Rosada por los audios filtrados de Diego Spagnuolo (extitular de la Agencia Nacional de Discapacidad) sobre presuntas coimas que habría cobrado Karina Milei, tuvo su rebote en Mendoza.
El mandatario provincial evitó hablar con la prensa en las dos actividades oficiales que hubo este martes y solo se remitió a su relación con el gobierno nacional durante el discurso que dio en una entrega de casas en Guaymallén.
Cornejo ratificó su apoyo al presidente, pero marcó que no lo hace con “fanatismo”, tomando cierta distancia en medio del revuelo y refiriéndose puntualmente a la problemática de la macroeconomía vinculada al acceso a la vivienda.
“Yo aspiro a que volvamos a ser un país normal y tengo el deseo enorme y la esperanza como tienen los mendocinos que el presidente Milei acierte con sus cambios económicos. Por eso lo estoy apoyando, no con un fanatismo como una minoría puede hacerlo”, apuntó el gobernador antes de entregar 38 casas en el barrio Azcuénaga.
Y continuó: “Con buenos modales, sin insultos, pero estoy harto a mí edad, de caídas y recuperaciones por poco tiempo en la economía argentina, donde no se puede planificar nada”.
“No podemos planificar los que le entregamos la vida al servicio público, pero mucho menos pueden hacerlo las familias que planean acceder a una vivienda”, apuntó el gobernador.
“Es imprescindible que la macroeconomía se ordene, porque si no, no habrá acceso al crédito hipotecario más masivo y con lo cual vamos a seguir corriendo de atrás al déficit habitacional que es alto en el país y en Mendoza”, sostuvo.
La construcción de viviendas
Cornejo destacó que el programa IPV Mi Casa, bajo el cual se construyeron esas viviendas, tiene un carácter de transición pero cumple un rol clave: “Estas 38 familias aportaron el equivalente a 25 salarios de su propio bolsillo. Ese esfuerzo, que sabemos que cuesta mucho, es fundamental para crear cultura de que la vivienda no es gratis. Es un sistema que debemos seguir consolidando hasta que la economía se normalice y el crédito hipotecario vuelva a ser accesible”.
El Gobernador subrayó también la magnitud del esfuerzo provincial: “Todas las semanas estamos entregando viviendas: 38 como hoy, 14 la semana pasada, más de 100 hace poco en Guaymallén… Hoy tenemos 536 en construcción en este departamento y obras en marcha en toda la provincia. Sabemos que no alcanzan, pero nos enorgullece no haber detenido la inversión aun cuando la obra pública se paralizó en casi todo el país”.
Finalmente, Cornejo concluyó con un mensaje de reconocimiento: “Quiero felicitar a estas 38 familias, pero también usarlas como ejemplo de mérito. Quienes hacen el esfuerzo de aportar acceden a su vivienda propia. Hasta que logremos una macroeconomía ordenada seguiremos trabajando con programas como éste, que muestran que organizándonos podemos dar soluciones aun en contextos difíciles”.