En medio del revuelo que causó "la desaparición de Lourdes Fernández", conocida artísticamente como Lowrdez, su padre Omar rompió el silencio y sostuvo que fantaseó con “tomar un bate de béisbol y partirle las rodillas” a Leandro García Gómez, ex pareja de su hija.
No obstante, aseguró que siempre trató de mantener la calma y le restó importancia a la denuncia de su exmujer. Mientras crecía el fuerte caos mediático y social, donde se hablaba de una reiterada situación de violencia de género, el padre de la artista sostuvo antes del mediodía: “La llamé, está con gripe y, por lo que sé, no está en la casa de esta persona”.
La supuesta congestión también fue el motivo por el que la intérprete brindó una imagen extraña en un video donde, en el reflejo de sus anteojos se veía la silueta de un hombre y que además tenía ediciones, pero su padre indicó: “Ella está en la casa de una amiga con la que comparte trabajo y en la semana o cuando tenga tiempo, vendrá para Hurlingham a la casa de una amiga”.
Su padre cuestionó a su madre por denunciar
Casi cuatro horas después, la intérprete fue hallada en la provincia de Buenos Aires tras la declaración en la comisaría por Lissa, su compañera de elenco en la “GirlBand”. Sin embargo, anteriormente, Omar consideró: “Estuvo con nosotros hace diez días, lo pasamos en familia, a lo más bien y sin ningún problema”.
“No sé qué motiva a la madre a hacer la denuncia. Todo lo que se dice son barbaridades que no tienen razón de ser. Con Lowrdez estamos en contacto siempre”, continuó el padre de la artista que sostenía que la situación estaba en orden.
“Nos enteramos de que volvió con él -Leandro García- y hace dos semanas aproximadamente, volvió a terminar la relación. No sé si realmente tenía una relación tóxica al extremo porque no conviví con ellos y no me consta”, añadió Fernández, aunque más tarde se rectificó.
“Sé que Lowrdez había salido con el tema de violencia de género y volvió a su casa después. No puedo tomar un hecho como preocupación porque la decisión es de ella y es adulta. No me corresponde juzgar”, añadió.
Sin embargo, a continuación asumió dicha violencia: “No tengo buena relación con Leandro y, como padre, más de una vez fantasee con agarrar un bate de béisbol y partirle las rodillas, sé que suena muy grave, no estoy conforme con esa persona, pero respeto las decisiones de mi hija”.
“No puedo confirmar la violencia que pudo haber habido, salvo los moretones que sé que fueron reales. Con el tiempo, se recuperó de esa situación, estaba enamorada, se reconcilió y supongo que la manipuló para que retire la denuncia. Ahora se volvieron a pelear hace más de 20 días”, asumió.