El regreso de El Pity Álvarez a los escenarios después de nueve años no pasó desapercibido. El exlíder de Viejas Locas eligió Córdoba para su vuelta y convocó este sábado a unas 35 mil personas en el estadio Mario Alberto Kempes.
El cantante de rock volvió a los escenarios y generó controversia por el inicio de su recital, una postal que en redes consideraron denigrante para las mujeres.
El regreso de El Pity Álvarez a los escenarios después de nueve años no pasó desapercibido. El exlíder de Viejas Locas eligió Córdoba para su vuelta y convocó este sábado a unas 35 mil personas en el estadio Mario Alberto Kempes.
Sin embargo, más allá del fervor del público, su entrada al escenario desató una fuerte polémica en redes sociales y abrió comparaciones inevitables con otros casos de la música internacional.
El show, anunciado para las 21, comenzó con media hora de retraso, tras un aviso en las pantallas y una cuenta regresiva. Cuando finalmente apareció, Pity lo hizo con gafas oscuras y acompañado por una mujer que realizó una performance de sadomasoquismo. Ingresó gateando, con una correa en el cuello, mientras el artista la llevaba como si fuera un perro y se fumaba un cigarrillo. La performance terminó y arrancó el recital con una intro acústica de El Rey, seguida de “Intoxicado”, tema emblemático de Viejas Locas.
La escena generó reacciones encontradas: mientras sus seguidores celebraron el regreso y vivieron dos horas de pogo, emoción y más de 30 canciones, en redes sociales se multiplicaron las críticas por el contenido sexualizado y simbólicamente violento de la puesta en escena.
“Impresentable”, “J Balvin hizo lo mismo y después Residente impartió justicia” y “Pity tiene que estar en juicio por las demandas de homicidio y abuso que tiene”, fueron algunas de las críticas.
Muchos usuarios recordaron que a J Balvin lo cancelaron por una estética similar y también apuntaron a Lali y Fito Páez cuando hicieron una escena sadomasoquista en una fiesta privada.
La comparación remite al caso del cantante colombiano J Balvin, quien en 2021 fue duramente cuestionado por el videoclip de su canción “Perra”, grabado junto a Tokischa. El video fue retirado de YouTube tras ser acusado de sexista y racista, ya que mostraba a mujeres afrodescendientes con bozales, cadenas en el cuello mientras eran “paseadas” por el cantante.
La polémica escaló a tal punto que Balvin pidió disculpas públicas en su cuenta de Instagram. “Eso no hace parte de lo que yo siempre he expresado. Lo mío siempre ha sido tolerancia, amor e integración”, sostuvo entonces, y agregó un pedido de perdón dirigido especialmente a las mujeres y a la comunidad afrodescendiente.