Las Cimas: anteponer la gracia al desconsuelo

Escrita y dirigida por Ariel Farace, esta obra nos invita a recorrer un mundo cargado de poesía, drama, humor, autocrítica, entre otras bondades propias del circuito alternativo. Se presenta el 28, 29 y 30 de julio en El Taller.

Foto - Juan Pablo Lemos
Foto - Juan Pablo Lemos

El extenso y creativo mundo de Ariel Farace vuelve a Mendoza, esta vez con lAs ciMAs que se presentará los días viernes 28 de julio (a las 21) sábado 29 (21) y domingo 30 (20).

Crítica artística: la vida sin teatro es como nadar en lo pandito

Para los amantes del teatro, para los que frecuentan cada tanto y para los que nunca se animaron, Las Cimas puede ser un buen punto de partida. Digo esto a riesgo de cometer la picardía de convidar under al Gran público, sin embargo, reafirmo el “improperio” y éstos son mis argumentos.

LAs ciMAs se presenta como un retrato barroco (con guiños cuyaños) que estudia los vínculos entre maestros y discípulos, pero es mucho más que eso.

Libre y absoluta interpretación

Si bien existen fuertes lineamientos desde lo argumental, y en este aspecto la obra resuelve mucho más de lo esperado, el código poético que propone el premiado dramaturgo nos invita conocer el mundo del teatro (en casi todos sus aspectos), desde una perspectiva desprejuiciada, de interpretación fluida y francas actuaciones que parecen terminar de formarse sobre tablas, como si se tratara de hologramas en carne y hueso. Las Cimas y su juego de metaversos entrecruzados permiten que uno de los atributos centrales del teatro brille con total intensidad: la presencialidad de los actos y la materialidad. Gracias a un texto cuidado y muy bien interpretado, los personajes y el público establecen conexiones de corte intimista y la única frontera posible son los límites de la imaginación. Esta misma particularidad, abre un juego infinito de interpretaciones “innecesarias” que se sostienen en una historia fácil de contar, pero difícil de explicar.

Foto - Juan Pablo Lemos
Foto - Juan Pablo Lemos

Teatro sobre teatro

La obra es para todo tipo de público adulto. Tanto para aquellos que suelen frecuentar salas como para los que nunca ha tenido el gusto de ver personas interpretando. Todos deberían embarcarse en este viaje. Es que Las Cimas puede adaptarse a cada uno sin tener que recurrir al remanido “elije tu propia aventura”. Aquí la aventura es interna y la propuesta además, es pedagógica. Las actuaciones recorren con soltura el clown, la farsa, el drama, la comedia, el absurdo y, por supuesto, el monólogo.

El trabajo protagónico de Manuel García Migani (Lorenzo) nos sirve de guía para entrometernos en este agitado universo, que no tiene pretensiones de querer convencer a nadie de nada. La interpelación es la clave y el trabajo gestual es el vehículo expresivo de casi todas las escenas en las que participa. No menor es el despliegue físico de esta actor, dramaturgo y docente; que se desenvuelve con vasta experiencia sobre un texto sinuoso para interpretar, pero que ofrece resultados simples en la recepción del mensaje. Excelente trabajo.

Destacable también es la actuación de la polifacética Eliana Borbalás quien, paradójicamente, interpreta a Eliana y nos eleva con este juego de realidades paralelas al punto máximo de incomprensión placentera sobre las “cosas que tienden a repetirse” (ergo no necesitan explicación) y es en esta incertidumbre que el personaje se desarrolla con espontaneidad. Eliana nos empuja a la posibilidad de reflexionar y divagar al mismo tiempo. La delgada línea entre ficción y realidad, el uso del distanciamiento y la satisfacción de una cuarta pared bien derribada, son posibles gracias a esta/e persona/je.

Punto a parte para resaltar la labor de Xeli Martín (Genoveva) y Ariel Rozen (Elías) que sumaron bastante desde lo plástico sin descuidar la carga emocional y humorística del guion. Genoveva es un poco el reflejo de la audiencia. Es el cable a tierra, el ansia por saber, la alegoría de que nada es lo que parece. En su performance se destacan la danza, la introspección y tal vez lo más “retorcido” que tiene Las Cimas: las pesadillas del adoctrinamiento y las relaciones de poder. Gran interpretación actoral de Martín, buen uso del registro vocal y sobresaliente variedad de recursos a la hora de atar y desatar tramas “colgadas” en el aire, aunque esto también es mérito compartido con el autor.

Elías es tal vez uno de los elementos que más me impresionó de esta obra. Tal vez hable desde lo personal porque soy fanático de los silencios, las métricas moderadas y los personajes sin principio ni final, pero lo cierto es que el trabajo de Rozen impacta en el mejor de los sentidos. Se nota el trabajo de ensayo en el color vocal y en el despliegue físico, aunque también son sus miradas las que se plantan de frente ante una audiencia que tiene deseos por saber más, pero tampoco se queda con las ganas.

El vestuario y la iluminación viajan en consonancia y son las únicas estructuras narrativas que tiene la obra desde lo visual. Enorme trabajo en este punto teniendo en cuenta que dichas herramientas están abocadas a la difícil (por no decir imposible) tarea de ordenar un mundo “real” con tonos fluorescentes y otro “ficcional” (teatro dentro del teatro) con las clásicas candilejas.

Altamente recomendable.

Foto - Juan Pablo Lemos
Foto - Juan Pablo Lemos

Argumento

Un viejo profesor y maestro teatral retirado (Lorenzo) convive con su ayudante (Elías) al pie de la montaña. Durante un fin de semana recibirá la visita de una antigua alumna (Eliana) y su joven discípula (Genoveva) que, dispuestas a recuperar la obra del profesor, intentarán concretar un intercambio de creación y aprendizaje que devendrá en catástrofe.

El espacio ficcional se inspira en un paisaje y una geografía reales: la zona del valle de Uco, en Mendoza, y los volcanes Tupungato (macizo sobresaliente y sin actividad magmática) y “Tupungatito” (menor en tamaño pero aún en actividad y con erupciones de materia volcánica). En la cercanía de ese paisaje, bajo una narrativa metateatral, la pieza traza líneas de fuga, digresiones, acentos poéticos y filosóficos. La trama tiene lugar en el lenguaje, las improntas generacionales, los ecos gestuales y el entorno en peligro de erupción.

Teatro - Ariel Farace
Teatro - Ariel Farace

PRÓXIMAS FUNCIONES

  • Fechas: Viernes 28 de julio, 21 horas / Sábado 29 de julio, 21 horas / Domingo 30 de julio, 20 horas
  • Lugar: Teatro El Taller, Granaderos 1964, Mendoza

El acceso a las funciones será solamente por compra de entradas anticipadas desde este link que también pueden encontrar en la bio de Instagram en la cuenta de la obra @las_cimas

  • Precio: 2500 pesos. La capacidad es muy limitada.
  • Con las actuaciones de: Eliana Borbalás, Manuel García Migani, Xeli Martín, Ariel Rozen
  • Asistencia de dramaturgia: Carolina Duarte del Río
  • Asistencia y operación técnica: Camila Nuñez
  • Carpintería lumínica: Atelier Livecof
  • Casco y zancos: Walter Lamas & Maite Corona
  • Pelucas: Mónica Gutiérrez
  • Vestuario: Grupo Caballos
  • Música: Florencia Sgandurra
  • Dramaturgia y Dirección: Ariel Farace
  • Duración aproximada: 100 minutos
  • Premios y menciones: una primera versión del texto recibió una Mención de Honor en el Premio Estímulo a la escritura 2021, co-organizado por la Fundación Proa, Fundación Bunge y Born, y el diario La Nación, otorgada por un jurado conformado por Pablo Gianera, Leila Guerriero, Ariana Harwicz y Mariano Llinás.
  • Recomendación: ubicarse en la primera fila que cuenta con almohadones y colchonetas para disfrutar el espectáculo de una forma distinta.

Las Cimas es una producción del Grupo Caballos en coproducción con Teatro El Taller (Mendoza), Paraíso club de artes escénicas y Teatro El Portón de Sánchez (CABA) realizada con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA