Insistir en la protección animal

Hay una ímproba labor de las organizaciones proteccionistas para conseguir que haya menos animales abandonados y que disminuyan las enfermedades zoonóticas. Además, los municipios deben realizarse más campañas de esterilización.

Los refugios de animales hacen lo que pueden, pero, al no contar con auxilios oficiales, en muchos casos están colapsados / Gustavo Rogé
Los refugios de animales hacen lo que pueden, pero, al no contar con auxilios oficiales, en muchos casos están colapsados / Gustavo Rogé

En Mendoza sigue registrándose la existencia de una gran cantidad de perros abandonados, aunque por diversos factores esa realidad disminuyó un poco en nuestras calles en los últimos tiempos.

De todos modos, es recurrente escuchar a integrantes de organizaciones proteccionistas que hay más canes que niños en ciertas barriadas carenciadas.

La situación económica ha determinado que muchas familias no sólo no adopten mascotas, sino que en muchos casos las abandonan en la vía pública, lo que se puede apreciar en distintos lugares del Gran Mendoza y en el piedemonte.

Los refugios de animales hacen lo que pueden, pero, al no contar con auxilios oficiales, en muchos casos están colapsados.

Hay otros que no cuentan con instalaciones para acoger a los animalitos y entonces lo que tratan de hacer es buscar lugares transitorios, lo que no siempre es sencillo.

En este caso la situación se torna insostenible: hay mucha más oferta de animales que buscan hogar que hogares disponibles.

Las agrupaciones particulares que se ocupan de esta tarea en Mendoza, y que son muchas y muy altruistas, podrían dar más servicio si fueran ayudadas por el sector oficial, pero, como no logran ese paso, se debaten con sus escasos recursos para subsistir y dar un servicio.

La clave para las entidades está en el sistema de castración masiva para controlar la población, además de la adopción para sacarlos de la calle y los refugios.

En la provincia de Mendoza, la Ley 7.603 declara al territorio como “no eutanásico” y adopta como método de control animal la esterilización.

Pero, el año de pandemia en curso y la crisis económica que se registra, agrava la situación y una de las salidas de este delicado problema de salud pública -ya que urge prevenir las enfermedades zoonóticas- es que los gobiernos municipales procedan a las esterilizaciones masivas, gratuitas y abarcativas.

Varias comunas están realizando estos procedimientos, pero no alcanzan a completar operativos muy amplios y muchos animales quedan fuera de esta protección sanitaria.

A la hora de ponderar acciones que tienden a procurar el bienestar animal, destacamos la jornada de adopción y sensibilización de protección animal que llevó a cabo recientemente la Municipalidad de Mendoza.

Lo interesante fue que no sólo intervino personal del municipio capitalino sino, también, integrantes de los colegios de Abogados y de Veterinarios, entidades civiles como Estoy Aquí Mendoza y Perros Plaza Independencia.

El objetivo de la iniciativa fue promover la protección y el bienestar animal a través del buen trato.

Los concurrentes pudieron adoptar perros y gatos.

Debido al contexto actual de pandemia que estamos transitando, los interesados en adoptar debieron llenar previamente un formulario online de preinscripción.

El respeto hacia la vida de los animales no sólo habla de lo que es positivo hacia ellos, sino que indica el modo en que los seres humanos valoramos la vida en general y estamos dispuestos a ayudarla a realizarse.

Defender la vida en todas sus expresiones es un modo de realizarnos y realizar la obra de la naturaleza.

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