De sus fotos cazando a ser vegana y proteccionista de animales: el radical cambio de Victoria Vannucci

Hace algunos años, Victoria Vannucci protagonizó una serie de fotografías cazando animales salvajes en un safari en África. El repudio fue tal que la modelo decidió irse de manera definitiva del país. Radicada en Estados Unidos y divorciada del empresario Matías Garfunkel, la ex modelo reapareció con una versión completamente renovada.

Empezando por su nombre, ya que ahora prefiere llamarse Vick Vannucci, la ex del “Ogro” Fabbiani comenzó una vida completamente distinta: ahora es vegana, proteccionista de animales y abrió un restaurante de comida saludable en San Diego al que llamó “Pachamama”.

Las imágenes cazando fueron un punto de inflexión: “Cuando me vi en esas fotos, me di cuenta de que era hora de un cambio serio”, sostuvo en diálogo con Mágazine Locale, un sitio de California. “Cometí mis equivocaciones en el camino, incluidas elecciones de las que no estoy orgullosa porque ignoraba la realidad de lo que está ocurriendo con la Tierra”, admitió Victoria.

El local gastronómico de la mamá de Indiana (7) y Napoleón (5) ha recibido varios premios como Best Menu, Best New Restaurante y Best Chef de California y a través de él busca inspirar a un consumo más consciente: “Me di cuenta en ese momento que no solo le estaba dando comida. Estaba transfiriendo mi amor y energía a través de un ingrediente que proviene de la Tierra”, afirmó, mostrando su enorme huerta a Pacific San Diego.

“Es vital que tomemos conciencia de cómo cultivamos y preparamos nuestros alimentos. Me llevó bastante tiempo comprender la verdadera importancia de estas cosas y cómo yo también debo convertirme en un administrador en este mundo, para ayudar a cuidar a otros seres vivos y nuestro planeta en el proceso. Y me di cuenta de que debo reconocer mis propios errores y rectificarlos”, reconoció, quien ha sido convocada por Netflix para una docu serie.

Y para concluir aseguró que “Pachamama está para proporcionar alimentos saludables, hechos con amor y respeto por cada ingrediente y cuidando el viaje que los lleva de la granja a la mesa, comenzando con el suelo en el que se los cosecha”.