Adoctrinamiento en la educación

La autora de esta nota critica el último operativo nacional de evaluación educativa realizado en Mendoza porque -en su opinión- más que evaluar busca adoctrinar.

Adoctrinamiento en la educación
Adoctrinamiento en la educación

El rol de la educación es indiscutiblemente central. Ante todo, es de liberación y emancipación ya que su misión es enseñar a pensar. Repito, enseñar a pensar y bajo ningún concepto "cómo" ni "qué" pensar. Resulta lamentable que esta aclaración aún sea necesaria.

En el marco del Operativo Nacional de Evaluación, que se realiza en todos los 5° años y es llevado a cabo, en Mendoza, a través de la Dirección de Evaluación de la Calidad Educativa, de la Dirección General de Escuelas, se hizo evidente la falta que hace, aún hoy, revisar el concepto que algunas personas e inclusive algunos sectores y sus dirigentes tienen de la educación. Sucede que estos exámenes muestran parcialidad que llega a calificar de adoctrinamiento.

En la semana del 19 al 23 de agosto, fue el turno de nuestros alumnos de ser evaluados en cuatro instancias: Lengua, Matemática, Ciencias Naturales y Ciencias Sociales.

Las sorpresas de esa semana fueron superadoras. Los Aplicadores traían una nota de presentación mediante la cual se informaba que "bajo ningún concepto" podían mostrarse las evaluaciones a quienes no fueran sujetos de las mismas y la prohibición de que docentes o directivos estuvieran presentes. Si uno analiza que el ONE es un censo del nivel educativo, esto es comprensible, por ahora.

Se desarrolló el operativo sin mayores inconvenientes hasta el turno de Ciencias Sociales, momento en el que una alumna percibió algo que la hizo sentir violentada, por lo que decidió copiar algunos puntos en los que el adoctrinamiento resultaba más evidente.

Para ella, los textos presentados en el examen "ponen al alumno en una situación de confusión e incertidumbre ante las distintas facciones del poder." Su lectura no pudo ser más acertada.

En los textos presentados vemos dos actores en una lamentable polarización: la inutilidad del radicalismo que hunde al país y la capacidad del justicialismo de rescatarlo. Al pasar, se menciona el rol de la Corte Suprema de Justicia para volver a hundirlo.

Califican abiertamente a gobiernos radicales de débiles, responsabilizándolos de crisis económicas, falta de desarrollo y alta conflictividad social. Una de las preguntas plantea: "A partir de la asunción del poder del radicalismo, la conflictividad social aumentó. ¿Cuál fue el año de mayor conflictividad social?"

También se lo responsabiliza de golpes de Estado, como el del 6 de setiembre de 1930, ya que el mismo "contó a su favor con la temporaria pasividad del pueblo argentino y con la inacción de un radicalismo incapaz de defender su propia sobrevivencia como partido político y como movimiento de masas."

Las respuestas posibles eran igualmente parciales: "El golpe de 1930 fue: a) Respaldado por el radicalismo y el pueblo argentino, b) Impulsado por la Corte Suprema de Justicia y las instituciones de gobierno, c) Facilitado por la pasividad del pueblo y la inacción del radicalismo, d)Facilitado por la actitud de la Corte Suprema de Justicia."

Con igual parcialidad se responsabiliza al justicialismo de los grandes crecimientos económicos, asegurar el pleno empleo y los salarios altos, y de su mayor logro: alcanzar una Argentina libre y soberana.

Uno de los textos habla de Perón y su política de la siguiente manera: "Receptor de las loas de su pueblo, ya perfectamente unido y organizado en partidos y sindicatos, reverenciado por las más poderosas estructuras corporativas, temido y respetado más allá de las fronteras, Perón pensó dar lugar a la nueva Argentina."

¿Qué lectura podemos hacer de estos textos? A mi parecer, la selección de textos es, como mínimo, tendenciosa.

¿No será que se persiguen fines políticos? Cada uno hará su interpretación.

Otro de los puntos hace mención a la Conadep, el año de su creación y el motivo: "La Conadep fue la Comisión Nacional de Desaparición de Personas creada en el gobierno de: a) Carlos Menem en 1994 para recabar información sobre las desapariciones forzosas realizadas durante la dictadura militar argentina de 1976 a 1983. b) Raúl Alfonsín en 1983 para recabar información sobre las desapariciones forzosas realizadas durante la dictadura militar argentina de 1976 a 1983. c) Carlos Menem en 1994 para justificar la realización del juicio a las Juntas por los delitos cometidos en la dictadura militar argentina de 1976 a 1983. d) Raúl Alfonsín en 1984 para justificar el perdón a los responsables de los delitos cometidos en la dictadura militar argentina de 1976 a 1983."

Teniendo en cuenta cuándo, con qué fines y quién creó la Conadep, ¿es posible la interpretación de una manipulación tendenciosa de datos históricos en la redacción de las opciones? ¿Qué lectura entre líneas podemos hacer?

Sin importar quién sea el receptor o su ideología, considero que esto es adoctrinamiento realizado en un Operativo Nacional de Evaluación llevado adelante a través de la Dirección General de Escuelas y ejercido sobre alumnos en pleno debut electoral.

La DGE es quién, entre otras cosas, debe velar por garantizar la integridad de la libertad de pensamiento y elección política de los alumnos, y evitar el adoctrinamiento mediante la manipulación de un método evaluativo.

¿Con qué garantías contamos cuando pasan cosas como éstas?

¿Cuál es el rol de la política si su forma de conseguir adeptos es ésta?

¿Cuál es el rol de la educación?

No hay declaración más honesta que ésta: la educación es emancipadora y liberadora, es la herramienta de construcción masiva más poderosa de todas. Nada tiene el poder y la fuerza de la educación, ¡nada! Todos aquellos que le dedicamos nuestras vidas lo sabemos y eso es lo más grave. No ha sido justamente el desconocimiento el responsable de esto sino el pleno conocimiento que se tiene sobre el resultado de la puesta en práctica de estas maniobras sobre sujetos vulnerables como los educandos.

Es imperiosa la necesidad de que, quienes nos gobiernan, comprendan e internalicen que la educación no debe ser servil a fines políticos. Sin embargo, ésta es nuestra lamentable realidad y nadie puede ni debe mirar para el costado. Es obligación moral dejar de ignorar. No sirve quemar o hacer desaparecer estos exámenes.

La educación, si recibe el valor supremo que le corresponde, el respeto que merece y es convertida en verdadera política de Estado, es lo único que puede hacer de esta Argentina el país grande que merece ser.

Tenemos que asumir la responsabilidad de dar una formación integral a nuestros jóvenes y no defraudarlos. La única forma de hacerlo es educar en el sentido más puro de la palabra, obviando nuestras preferencias personales.

Comprendamos de una vez por todas que sin educación no hay futuro y que adoctrinar no es educar.

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