Una tierna e inesperada situación ocurrió este domingo en la localidad de Richmond, en la isla sur de Nueva Zelanda, una foca bebé ingresó en un bar. Los clientes del lugar se quedaron sorprendidos antes la presencia del animal y la escena causó furor en redes sociales.
El momento quedó registrado en las cámaras de seguridad del lugar, que capturaron al tierno animal al irrumpir en el establecimiento.
"Todo el mundo estaba en shock", explicó Bella Evans, una de las propietarias del local, en declaraciones recogidas por el medio británico The Guardian. Los comensales, sorprendidos por la presencia de la criatura se preguntaban,"¿Qué hacemos? ¿Qué está pasando?".
La foca sorprendió con su aparición
En un primer momento, un cliente intentó guiar al animal hacia la parte trasera de la tienda, pero la foca entró al baño y se escondió bajo el lavavajillas, que rápidamente los dueños desenchufaron para evitar que el animal se electrocute.
Evans intentó sacar al animal ofreciéndole salmón. Finalmente llegaron los agentes del Departamento de Conservación, quienes ya estaban tras la pista del animal extraviado ya que habían recibido previamente cuatro llamadas que denunciaban esta situación ese mismo día.
A pesar de que esta escena parece ser inusual, los científicos la llama una "estación tonta" de focas y leones marinos. En este periodo de varios meses al año en el que estos animales suelen aparecer en lugares inesperados, como casas, campos de golf o carreteras muy transitadas.
La foca esta a salvo y fue liberada en la cercana Isla Rabbit, un lugar considerado seguro para la especie por la ausencia de perros. Por su parte, la portavoz del Departamento de Conservación Helen Otley aclaró que no es inusual que las focas jóvenes aparezcan en lugares inesperados en esta época del año, ya que son capaces de remontar ríos y arroyos hasta quince kilómetros tierra adentro.