Organizaron una pisada infantil de uva para reivindicar la identidad mendocina

Una actividad lúdica arraigada a la tradición y a la identidad mendocina tuvo lugar en las últimas horas en la plaza central del barrio La Toscana, organizada por la Fundación Vivencias Argentinas.

La actividad, destinada a niños de uno a 12 años, se realizó con uvas del viñedo Malbec situado al ingreso del barrio --sector conocido anteriormente como rotonda de La Gota-- y de acceso libre. Durante alrededor de una hora y media, las familias acompañaron a sus hijos a realizar una tarea típica de la Tierra del Sol y del Buen Vino, además de recibir una charla explicativa sobre el proceso de la vitivinicultura.

La fundación, que lleva más de 30 años de vida y es presidida por Carlos Pincolini, requería a los niños llevar algunos elementos importantes, como bidón de agua, toalla y jarra para llevar a los hogares el jugo de la uva.

Asimismo, los participantes colaboraron con una entrada solidaria que consistió en un juguete para un establecimiento educativo de El Carrizal. Como se sabe, la institución se basa en actos solidarios que trascienden el Gran Mendoza y llegan hasta escuelas situadas en cercanías de San Juan.

“Es el tercer año consecutivo que realizamos esta actividad que tanto amamos. La idea es que los niños se vayan familiarizando con el proceso de vinificación a partir de la denominada pisada”, indicó Pincolini a Los Andes, para agregar que la finalidad es que entiendan el trabajo esforzado y sacrificado de los trabajadores rurales que trabajan en las fincas de uva.

“Quisimos que entiendan que deben respetar a las familias que viven de esta tarea que es la base productiva de Mendoza y decidimos hacerlo en el marco de la cosecha de uva”, agregó Pincolini.

Agregó que el sector de donde se extrajo la uva es de libre acceso. En esta ocasión se decidió realizar la actividad en la plaza del barrio.

“Llevamos a cabo otras actividades en distintos barrios, todas ellas relacionadas con la resciliencia pero siempre tomando la idea de las necesidades y posibilidades que tiene Mendoza en el desarrollo industrial y artesanal de la vitivinicultura”, puntualizó.

En otro orden, aunque siguiendo la misma línea de recordar los hechos importantes de la Argentina y en especial de la Patria, la fundación organizó en el mismo barrio un homenaje relacionado con la Gesta de Malvinas.

“Uno de los objetivos de la fundación es conmemorar las fechas patrias y en este sentido rendimos homenaje a los caídos y veteranos de Malvinas”, añadió el presidente, para agregar que la entidad cuenta con una chaqueta de un ex combatiente mendocino que fue exhibida en la oportunidad.

“Para nosotros el 2 de abril es una fecha muy sentida y especial. Nos hemos sentido representados por un tío abuelo de una de las integrantes de nuestro grupo, un médico que estuvo en Puerto Argentino atendiendo heridos y sobrevivientes en medio de la contienda”, expresó.

“Un médico que prefiere mantenerse en el anonimato pero que nosotros respetamos muchísimo. Una persona que entregó su vocación a la Patria y permaneció junto a sus pacientes hasta la rendición acompañando luego a los prisioneros de guerra hasta ser restituidos al continente. Fue un emotivo homenaje a él y a los mendocinos que estuvieron en Malvinas”, añadió Pincolini.

Cada 2 de abril, dijo, este encuentro es un verdadero motivo de unión entre distintas generaciones ya que, entre los presentes se encontraban abuelos, padres, hijos y nietos.

Un camino de tres décadas

Los 30 años de la fundación Vivencias Argentinas fueron celebrados recientemente en el Colegio San José de los Hermanos Maristas con la presencia de su equipo de colaboradores, docentes y público en general y una sorpresa, la participación de la banda del Servicio Penitenciario, que hizo emocionar al público con el himno y otros temas alusivos a la Patria.

Durante todo ese trayecto la entidad llevó a cabo numerosas campañas y colectas, aunque se destaca las tradicionales del Día del Niño. Hasta el momento se contabilizan nada menos que 23.

La última, en octubre, involucró la entrega de zapatillas por un valor de 1 millón de pesos.

Desde sus inicios Vivencias tuvo como objetivo promover, realizar y apoyar actividades científicas, tecnológicas, educativas y culturales que favorezcan el desarrollo del conocimiento y de la formación integral de la persona.

En el comienzo estuvo formada por jóvenes, una característica que hoy sigue, con el apoyo de personas mayores que permiten que la organización funcione en forma proactiva.

La última y exitosa campaña se llevó a cabo en el secano de Lavalle y en Calingasta, San Juan. Mediante rifas y el aporte de muchísimos allegados, se entregaron nada menos que 300 pares de zapatillas por un valor de un millón de pesos.

Asimismo, la fundación llegó a escuelas rurales de San Juan, en Calingasta, llevando juegos inflables y juguetes, además de zapatillas, mientras que hacia fin de año hizo lo propio en seis establecimientos pertenecientes a Lavalle, Santa Rosa y La Paz.

Con el clásico camión con el que suelen hacer este tipo de cruzadas, además de una camioneta doble tracción, recorrieron en esta última oportunidad un total de 500 kilómetros, la mitad de tierra.

“De ese total, 50 kilómetros fueron casi a paso de hombre por el estado del camino. Es decir, demoramos cinco horas solamente para esa escasa distancia, pero fue tan increíble el recibimiento y el cariño recibido que regresamos con el corazón lleno”, indicó Pincolini.

Aclaró: “Con el dinero recaudado compramos zapatillas de primera calidad, las que entregamos en cajas a cada niño con su número correspondiente”. El presidente de la fundación no dejó de agradecer a quienes hacen su aporte. También recordó iniciativas muy loables y solidarias que continúan hoy sin prisa ni pausa alentadas por un importante equipo de trabajo.

“Todas las actividades, como siempre, están orientarlas a los dos grandes objetivos de nuestra fundación, solidaridad y conocimiento, haciendo lo que más nos gusta y trabajando por un mundo mejor para nosotros y nuestros hijos. La pisada de uva es fundamental para que comprendan nuestros orígenes, mientras que el acto de Malvinas es algo que nunca dejaremos de hacer”, concluyó.