La Legislatura reconoce la labor de tres adolescentes mendocinos que crearon una aplicación contra el bullying

Las cámaras de Diputados y Senadores declaran hoy de interés provincial un proyecto innovador llevado a cabo por tres programadores adolescentes oriundos de Mendoza que crearon una aplicación contra el acoso escolar.

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Se trata de Lorenzo Marquesini (17); Valentín De Antonio (16) y Matías Cúneo (17) quienes, a través de su plataforma denominada Qaizen, alumnos de la secundaria pueden denunciar posibles casos de bullying (acoso) y de violencia en los colegios de Mendoza.

Los adolescentes comenzaron a pergeñar el proyecto cuando uno de ellos vivió un fuerte episodio en la escuela, puntualmente en el DAD, cuando se suscitó un posible caso de suicidio. Esa situación los alertó sobre la deficiente comunicación que existe en los establecimientos educativos de la provincia, por lo que buscaron mejorar ese aspecto antes de que pasen a males mayores. “Cuando se habla de estos temas es porque se llegó a casos graves. Por ese motivo, nosotros llevamos trabajando más de 9 meses en este sitio web con el objetivo de revertir esta tendencia”, explicó el alumno del Colegio Maristas.

En cuanto al funcionamiento de la página, explicó: “Lo primero que tiene que ocurrir es que las escuelas interesadas contraten el servicio. A partir de ahí, el mecanismo de la plataforma facilita no solo la comunicación con los alumnos, sino también la organización de los problemas. La idea es prevenir casos y tratar los que ya están ocurriendo antes de que se agraven”.

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Este nuevo sistema es una aplicación web, ya que funciona como una app “con la diferencia de que siempre se está en línea” permitiendo el reporte a las autoridades, y especificó que no son anónimos, pero sí privados, ya que cada institución debe cargar los datos de los alumnos y las alumnas dentro del sistema, por lo que solamente serán las personas mayores competentes quienes tomarán conocimiento de los inconvenientes.

“Esta forma de comunicar es muy importante porque muchas veces si alguien ve que algo sucede no lo dice por miedo a que lo vean o que lo juzguen. Además, de esta manera se evita que envíen mensajes falsos por algún problema personal o solamente para molestar”, indicó Lorenzo.