En Mendoza, 4 de cada 10 personas dependen totalmente del sistema público para la atención de su salud. Es la conclusión de una encuesta que preguntó sobre su cobertura a usuarios del Gran Mendoza y ante lo cual respondió esto 42,32%.
El abordaje mostró que es mayor la proporción de mujeres en esta situación, mientras que se triplicó la cantidad de gente que puede costearlo de su bolsillo.
En Mendoza, 4 de cada 10 personas dependen totalmente del sistema público para la atención de su salud. Es la conclusión de una encuesta que preguntó sobre su cobertura a usuarios del Gran Mendoza y ante lo cual respondió esto 42,32%.
Por el contrario, 46,20% aseguró que ante la necesidad de atención de su salud, dependería de la cobertura de su obra social o prepaga mientras que, más holgado, un 11,48% dijo que podría costear el tratamiento sin problemas.
El abordaje, realizado por la consultora Demokratía, también realizó una comparación en relación a consultas previas lo que permitió observar que el último año y medio hubo fluctuaciones aunque no determinaron un cambio notorio en este escenario. Así, quienes dependen del sistema público pasaron de ser 44,31% en noviembre de 2023 a 41,40% en abril de 2024 y 42,32% en abril de este año.
La encuesta incluyó personas mayores de 16 años y se realizó entre el 14 y el 18 de abril.
“Si bien las respuestas de los ciudadanos mendocinos permanecen estables a través del tiempo, el dato relevante tiene que ver con una sustantiva diferencia entre la forma en la que los varones y las mujeres pueden encarar un tratamiento médico. Allí de forma clara y categórica se evidencia la diferencia de recursos económicos disponibles que hay entre los diferentes géneros confirmando una vez más la enorme brecha que existe entre estos a instancias del poder adquisitivo”, analizó Nicolás González Perejamo, Director de Demokratía.
Efectivamente, la proporción de mujeres que dependen del sistema público de salud está más de 10% por encima de los varones en la misma situación. En el trabajo, 47,31% de las mujeres quedaron en ese segmento versus 36,73% de los varones. Asimismo es levemente superior la proporción de varones que podrían afrontar el costo de su bolsillo sin problemas: son 12,82% mientras que respondieron esto 10,10% de las mujeres.
En tanto, 42,59% de las mujeres dijo que dependería de la cobertura de la obra social o prepaga frente a 50,45% de los varones.
El abordaje también consultó sobre el acceso a vivienda propia, al considerar el hogar y al acceso a atención de la salud como derechos humanos fundamentales. Como conclusión a partir de las respuestas, 35% de los mendocinos consideró “imposible” acceder a una casa propia. En contraposición, prácticamente la misma proporción ya tiene una vivienda propia, escenario que deja fuera a casi 7 de cada 10 personas que deben resolver su situación habitacional como se puede.
Entre octubre de 2023 y abril de este año hubo una disminución de la proporción de gente que tiene casa propia qué pasó de 39,76% a 35,87%. Además se incrementaron notoriamente quienes consideran que concretar esa necesidad es imposible. Esta proporción en ese mismo periodo pasó de 28,38% a 34,67%.
Por otra parte, se puso en evidencia que hay una parte de los mendocinos que tiene buenas expectativas ya que 16,85% sostuvo estar seguro de que tendrá su vivienda en el futuro. En tanto, hay un 9,18% que lo considera muy difícil y 3,43% de los consultados dijeron que no les interesa tener vivienda propia.