En En El Medio De Todo, conversamos con Lautaro Campione, el piloto mendocino de apenas 16 años que está a punto de dar un salto decisivo en su carrera: viajar a Europa para entrenarse y subirse por primera vez a un monoplaza de Fórmula 4. Sencillo, entusiasta y todavía asimilando lo que vive, cuenta cómo empezó todo y qué significa verse tan cerca del sueño que persigue desde que era un niño.
Nacido en Las Heras, Lautaro comenzó a correr en karting a los 6 años, una disciplina que considera fundamental para cualquier piloto: “El karting es lo más lindo del automovilismo. Te enseña todo desde temprano: acelerar, doblar, pasar. Para mí es la base de todo”, afirma. Aunque hoy ya compite en autos, no pierde la pasión por esa categoría que lo formó.
El sueño de llegar a Europa empezó cuando era muy chico, y hoy, asegura, se siente ante una oportunidad única: “Era muy chiquito y siempre soñé con viajar afuera, aunque fuera para probar. Se dio la oportunidad y traté de aprovecharla, porque estas cosas pasan una sola vez".
Aunque avanza rápido en su carrera —ya pasó por Top Race Junior y TC2000— dice que vive este presente con calma: “Capaz que todavía no caigo en lo que logré con 16 años. Trato de esforzarme lo máximo y disfrutarlo”.
Sus referentes también lo inspiran. Lautaro ya tuvo la posibilidad de conocer y competir contra su ídolo, Matías Rossi: “Me puse nervioso cuando lo tuve enfrente, es un gran referente para mí”, recuerda entre risas.
En casa, la pasión viene de familia: “Mi papá y toda su familia corrieron; del lado de mi mamá son todos futboleros, cuenta. Y aunque él nunca jugó al fútbol, sí tuvo claro desde que vio su primera carrera que quería subirse a un karting.
El salto a autos de mayor potencia también lo marcó. Aunque reconoce que en el karting se siente “menos protegido”, la velocidad y el riesgo están presentes en ambas categorías: “En el auto voy a 250 km/h y voy más protegido, pero el peligro es el mismo”.
Ahora llega el gran desafío. El 14 de febrero viajará a Bolonia, donde comenzará un proceso de evaluación integral. “Primero nos preparan físicamente, después pasamos por el simulador y también tenemos días con psicólogo. Luego vamos a la pista a probar”, detalla.
Respecto a su preparación física, se siente listo: “Entreno desde los 10 años. Quizás me falta un poco de fuerza en el cuello, pero estoy bien. No me canso como antes”.
Con la madurez de un piloto mucho mayor, Lautaro encara esta etapa con entusiasmo y humildad. Lo impulsa la pasión por un deporte que lo acompaña desde que se subió por primera vez a un karting. Hoy, ese camino lo lleva a Europa y, posiblemente, al automovilismo grande.
Escuchá la nota completa acá y podés escuchar la radio en vivo en www.aconcaguaradio.com