Entrevista a Elma Roura: “El sexo tántrico es una herramienta para conocernos en profundidad”

La española Elma Roura se especializa en el desarrollo personal de los individuos y es reconocida por haber creado en su país natal un proceso pionero en aprender a subir la energía sexual. En Argentina se acaba de editar su libro “El camino al éxtasis” y charlamos con ella sobre su método, la sexualidad en las sociedades actuales y los cambios de paradigma en la pandemia.

¿Qué se necesita para ser feliz? ¿Cómo dejar de sentir ansiedad? ¿Cuál es la forma de conectar sexualmente conmigo mismo y con mi pareja? Esos son sólo algunos de los interrogantes que Elma Roura intenta desentrañar hace ya más de diez años junto a los hombres y mujeres que se acercan a consultarla.

Nacida en España, Roura se especializa en el desarrollo personal de los individuos y es reconocida por haber creado en su país natal un proceso pionero en aprender a subir la energía sexual. Además, a través de diferentes cursos y talleres, ayuda tanto a hombres como mujeres a salir del sufrimiento gestionando el dolor y el placer.

A raíz de la reciente publicación en Argentina de su libro El camino al éxtasis, charlamos con Elma Roura sobre su método, la sexualidad en las sociedades actuales y los cambios de paradigma que nos vino a traer la pandemia.

Elma Roura, autora del libro "El camino al éxtasis".
Elma Roura, autora del libro "El camino al éxtasis".

-¿Cómo fue que te iniciaste en este camino de enseñar a las personas a desarrollarse?

-Empecé muy joven, mi historia no es muy habitual porque la mayoría de las personas tienen una vida que es la que les toca y a los 40 años tienen una crisis y se reinventan. No es mi caso. Yo empecé con 14 años, tenía un contexto de gente que me inició en el desarrollo personal, un ambiente muy sano y me dedico a esto desde que puedo trabajar. Mi inquietud siempre fue del desarrollo personal, de salir del sufrimiento y el tema de la sexualidad fue saliendo luego con mis talentos ocultos. Cuando la mente se relaja tu verdad aflora.

-Una parte muy importante de tus enseñanzas hablan del tantra. ¿Cómo lo definirías?

-Cuando dejas de sufrir, que eso es un camino de toda la vida y un compromiso diario, el lugar donde caes es tantra. Es ese lugar de éxtasis, porque el éxtasis no tiene nada que ver con el sentirme bien sino que es un estado más profundo.

-Al escuchar éxtasis uno suele relacionarlo con algo sexual...

-Sí, pero en realidad va mucho más allá. Es un estado de conciencia. Por eso yo recalco la parte de salir del sufrimiento. Porque un tantra enfocado solo a la sexualidad es pobre, porque muchas veces las formas en la que vives la sexualidad te hace sufrir. Tantra es un espacio de expansión, pero ¿cómo te vas a expandir si estás sufriendo ya sea por sexualidad, o por relaciones o por apegos o por lo que sea?

-¿Qué es lo que más les cuesta a quienes se acercan a consultarte?

-Cuando son temas de sexualidad, en las mujeres preocupa mucho el tema de la falta de libido y de la dificultad de llegar el orgasmo. Y en los hombres la eyaculación precoz.

-¿Son problemas que tienen que ver con las formas de vivir en las sociedades actuales?

-El tema de los orgasmos con las mujeres sí, es evidente que tenemos una sociedad donde la sexualidad está enfocada en el hombre y se ha reprimido la sexualidad y la energía femenina. Siempre digo: preguntale a tu abuela si tenía orgasmos. Hay tabú en la sexualidad, entonces claro, si la sexualidad está enfocada en un pene, ¿dónde está el placer femenino? Si la sexualidad está enfocada en el coito, ¿dónde está el placer femenino? Si sabemos que el 93 % de las mujeres tienen orgasmos a través de fricción el clítoris a nivel externo. Qué locura.

-¿Creés que actualmente hay una mayor liberación sexual en las mujeres?

-Yo creo que sí, que este movimiento es real. Pero creo que nos hace falta mucho más la madurez a nivel emocional, ahí te diría que no es tan real. Pero a nivel sexual sí que hay una revolución real, hay muchas mujeres que se están recuperando de su sexualidad. Aquí en España hay un gran movimiento.

-¿Ese es un trabajo en solitario o que tiene que hacerse en pareja?

-Yo tengo que ser dueña de mi placer y eso es yo con yo. Es un compromiso conmigo misma y no puedo depender de que un hombre me dé placer. Pero cuando yo estoy completa sexualmente entonces sí se abre ese diálogo, porque evidentemente somos dos. Yo lo vivo así. Tengo que hablar desde la abundancia. Yo sé darme placer, orgasmos, conozco mi sexo bien, y entonces tengo el amante que tengo y a partir de ahí generamos un discurso, un diálogo.

-¿Qué consejo darías a quien quiere iniciarse en ese camino?

Le diría que lo primero que tiene que encontrar es el espacio. Mucha gente viene con falta de libido pero en su propia agenda no tiene tiempo para ellas mismas, ¿cómo no va a tener falta de libido? ¿Cuánto tiempo le dedicas a tu propio cuerpo? Entonces el primer paso es priorizarte, y el segundo sería hacer meditaciones de erotismo a la mañana. Pongámonos reales, abramos la agenda y veamos cuánto tiempo tenemos para nosotras mismas.

-Yendo al terreno actual, ¿cómo creés que cambió la pandemia nuestras relaciones?

-Son momentos muy difíciles. Todas las relaciones se están cayendo, las estructuras, la sociedad está fragmentada con las personas que son obedientes y las personas que se cuestionan. Ya no hay una línea delgada, hay un muro enorme. Aquí hay tema para rato a nivel social y a nivel personal también.

-¿Pensás que hay forma de capitalizarlo, encontrar lo positivo?

Cuando hay crisis, las mismas pueden traer destrucción u oportunidad. La comodidad siempre es un lugar lento y no demasiado evolutivo, porque estás cómodo. Cuando empiezas a estar incomodo empiezas a movilizarte, es doloroso este juego de morir y renacer pero lo positivo es que si algo no funciona se va a morir y tienes oportunidad de crear algo nuevo. Lo positivo es empezar a crear una vida que te gusta y no solo la que tienes. Hay cosas que van a renacer.

-¿Qué es lo más desafiante hoy, en este contexto, al momento de tener una pareja sana?

-Lo más desafiante es que uno de los dos trabaje y el otro no. Y luego a nivel práctico son los horarios. Llegas a casa y a las 10 de la noche agotada ¿te vas a poner a tener sexo? Ni loca.

-Y entonces, ¿cuál es tu consejo?

-Hay que levantarse muy prontito (risas). Hay que levantarse a las 5.30 de la mañana para tener más energía y para poder encontrarnos porque por la noche no tienes tanta energía y te lo digo yo que soy la mujer más nocturna de la humanidad. Pero realmente funciona. Ese sería el primer paso: cambia tus hábitos.

-¿Y en el caso de las parejas con hijos?

-Hay que acostarse cuando se acuestan los niños. Las parejas empiezan a tener vida cuando los niños se van a dormir. Me parece súper mal plan. Los niños se levantan a las 7 u 8 de la mañana, si te levantas a las 5.30 ¡mira que polvo más largo tienes! Sí se puede.

-Uno suele asociar el sexo al momento nocturno…

-La noche es más erótica y más misteriosa, pero a las 5.30 de la mañana también es de noche (risas). Esto es como la alimentación: de vez en cuando puedes comer un chocolate pero si comes todos los días se te va a hinchar el hígado. Es lo mismo. De vez en cuando podemos trasnochar, pero que los hábitos sexuales sean diurnos.

-¿Es posible para todos desarrollarse en el camino del sexo tántrico?

-Sí. Hay que meditar porque si tú no meditas todo el estrés y las emociones las llevas también a la cama. Es como los yoguis que no pueden ser solo yoguis para la postura de Instagram, tienes que tener una práctica. Depende de tu compromiso pero se puede lograr en unos meses.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA