Estos pancitos sin harina son una solución práctica para cuando querés algo casero, rápido y liviano. Se preparan en minutos, no llevan harina de trigo y usan solo tres ingredientes básicos que seguro tenés en casa. Quedan suaves, esponjosos y sirven tanto para versiones dulces como saladas, ideales para el desayuno o la merienda.
(Opcional: una pizca de sal para versión salada o una cucharadita de azúcar para versión dulce.)
Pancitos sin harina en minutos rápidos, saludables y con 3 ingredientes (1)
Paso a paso para hacerlos en minutos
Colocá el huevo en un bowl y batilo apenas hasta que se integre bien la clara con la yema.
Sumá la maicena y el yogur, mezclando con cuchara hasta lograr una preparación espesa, lisa y sin grumos.
Calentá una sartén antiadherente a fuego bajo, con unas gotas de aceite repartidas con papel de cocina.
Volcá la mezcla formando pequeños discos, tipo pancitos, dejando espacio entre uno y otro.
Cociná tapados durante 2 a 3 minutos, hasta que la base esté firme y la superficie pierda humedad.
Dalos vuelta con cuidado y cociná 1 a 2 minutos más, hasta que estén dorados y bien cocidos.
El resultado son pancitos blandos, flexibles y livianos, listos para rellenar o comer solos.
Pancitos sin harina en minutos rápidos, saludables y con 3 ingredientes (2)
Consejos para que salgan perfectos
Usá siempre fuego bajo, porque la maicena se dora rápido.
Si los querés más esponjosos, batí bien el huevo antes de sumar los demás ingredientes.
Para una versión salada, agregá queso rallado o semillas a la masa.
Para una versión dulce, sumá vainilla o un toque de miel al servir.
Cómo servirlos
Estos pancitos sin harina van perfecto con queso crema, palta, mermelada, miel o jamón y queso. También se pueden cortar al medio y usar como base de mini sándwiches rápidos.