Este postre de leche condensada es un clásico infalible y de pocos ingredientes, para resolver rápido el menú familiar.
Si te gustan las recetas rápidas y un postre irresistible, este flan de leche condensada es la opción ideal. Con pocos ingredientes y sin complicaciones, podés hacer un flan casero con una textura suave y un sabor increíble. Además, es perfecto para esos momentos en los que querés algo dulce sin pasar horas en la cocina.
Además, es ideal si estás cuidando tu nutrición o si buscás una opción más liviana dentro del mundo de la comida casera. Con solo unos pocos ingredientes, podés preparar un postre saludable y delicioso que se adapta a cualquier momento del día, ya sea como merienda o acompañamiento.
Recetas
Esta receta es ideal para esos días donde se quiere comer algo sano y rico.
web
Ingredientes
- 1 lata de leche condensada.
- 2 medidas de la lata de leche común.
- 3 huevos.
- 3 cucharadas de azúcar.
Recetas
Esta receta es ideal para esos días donde se quiere comer algo sano y rico.
web
Paso a paso para hacer este postre
- Hacer el caramelo: Colocá las tres cucharadas de azúcar en una sartén y calentá a fuego medio. No lo mezcles, simplemente dejá que el azúcar se derrita hasta volverse un caramelo dorado. Cuando esté listo, volcá el caramelo en las flaneras o en un molde grande, cubriendo bien la base.
- Preparar la mezcla del flan: En un bol, batí los huevos junto con la leche condensada y la leche común. Revolvé bien hasta que todo quede bien integrado y sin grumos.
- Cocción al baño maría: Verté la mezcla en las flaneras y llevá al horno precalentado a 180°C. Cociná a baño maría durante aproximadamente una hora.
- Enfriar y desmoldar: Cuando esté listo, dejá que el flan se enfríe a temperatura ambiente y luego guardalo en la heladera por unas horas. Para desmoldarlo fácilmente, pasá un cuchillo por los bordes y sumergí la base del molde en agua caliente durante unos segundos.