Varios electrodomésticos del hogar utilizados a diario pueden representar un riesgo si no se manipulan correctamente. En la cocina, uno de los ambientes más vulnerables, el exceso de electricidad acumulada en ciertos aparatos puede provocar incendios si no se los desenchufa después del uso.
La tostadora, un riesgo subestimado
La tostadora es uno de los dispositivos más comunes en los hogares. Pero también es uno de los más olvidados a la hora de desconectar.
Aunque parezca apagada, si permanece conectada, la corriente sigue pasando por su sistema interno, lo que puede generar calor residual y provocar un cortocircuito o una combustión espontánea.
El aparato que debe desenchufarse después de su uso para evitar incendios en la cocina (3).jpg
Cómo y por qué desenchufarla siempre
Especialistas en seguridad eléctrica recomiendan desenchufar la tostadora inmediatamente después de usarla. A pesar de tener una perilla de apagado, la mayoría de los modelos mantienen activas ciertas conexiones internas mientras están conectadas a la red eléctrica.
Materiales necesarios para una cocina más segura
Para prevenir estos accidentes, se recomienda tener en la cocina:
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Bases con corte automático de electricidad.
Enchufes múltiples con interruptor.
Un detector de humo funcional, sobre todo cerca del área de cocción.
- Superficies limpias y sin elementos inflamables cercanos al aparato.
El aparato que debe desenchufarse después de su uso para evitar incendios en la cocina (1).jpg
Consejos clave para evitar accidentes eléctricos
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Limpiar la tostadora regularmente y sacar las migas acumuladas.
Revisar el cableado y evitar que esté doblado o en contacto con el calor.
Alejarla de cortinas, repasadores o frascos de vidrio.
No dejarla enchufada si no se la está utilizando.