Tres mendocinos presentes en el anuncio de la reforma judicial: Palermo, Sagasti y Ramón

El presidente Alberto Fernández anunciará en instantes el proyecto oficial que enviará al Congreso para reforma la Justicia Federal y ampliar la Suprema Corte. El dato para nuestra provincia es que, según las fotos que tomó el corresponsal de Los Andes, hay tres mendocinos que serán parte del acto en la Casa Rosada: Omar Palermo, juez de la Suprema Corte de Mendoza y quien será parte del comité de 11 expertos que asesorá al Presidente en esta reforma; y José Luis Ramón, el diputado nacional de Protectora que confirma, una vez más, su acercamiento al kirchnerismo.

También será parte del anuncio de Fernández la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti, legisladora que funciona como mano derecha ejecutora de las políticas que impulsa su jefa política Cristina Kirchner, a quien se señala como la verdadera ideóloga de esta reforma judicial.

De qué se trata

La reforma judicial no es solamente un proyecto de ley, sino que se trata de un conjunto de iniciativas que corren a distintas velocidades y cuyo diseño fue elaborado por el propio Presidente, la ministra Losardo y los secretarios de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, y de Legal y Técnica, Vilma Ibarra.

El proyecto que Fernández mandará al Congreso estaría ceñido estrictamente a al propósito de mejorar el fuero federal, fusionando los 12 juzgados criminales con los 11 de penal económico y duplicando su número para dinamizar esta área judicial que se ocupa de los delitos complejos como narcotráfico, trata y corrupción.

El jefe de Estado ya explicó esta propuesta no solamente en diversos reportajes periodísticos sino también en su discurso del 1º de marzo ante la Asamblea Legislativa, durante el cual también anunció la creación de un Consejo Consultivo lo asesorará en aspectos claves del servicio judicial, como la composición de la Corte Suprema, el funcionamiento del Consejo de la Magistratura y la implementación del sistema acusatorio.

Esos tres, precisamente, son los puntos calientes de la reforma judicial, y no tanto la unificación y duplicación de los juzgados federales.