Flora Inés Moyano, de 61 años, fue encontrada asesinada y "descartada" entre unos yuyos de Las Heras. La mujer, madre de una joven, se convirtió en una nueva víctima de femicidio en Mendoza.
Mercedes Rus, ministra de Seguridad, escribió sobre Flora Inés Moyano, asesinada en un descampado: “Una víctima que no fue protegida”.
Flora Inés Moyano, de 61 años, fue encontrada asesinada y "descartada" entre unos yuyos de Las Heras. La mujer, madre de una joven, se convirtió en una nueva víctima de femicidio en Mendoza.
La mujer fue asesinada brutalmente por Walter Jesús Amador Molina, también de 61 años. En 2015 fue condenado por violar a su hija adolescente. Además arrastraba sentencias por homicidio, robo y amenazas.
Pese a su macabro historial, la jueza Mirna Elisa Montaldi, le permitió las salidas transitorias. Una decisión que generó indignación general y polémica con el Ministerio de Seguridad, Su titular salió a criticar la decisión.
Pese a estos enojos a destiempo, lo cierto es que Flora fue brutalmente asesinado por un violador y homicida condenado.
Molina solicitó las salidas transitorias este año y una jueza se las concedió, pese a los informes negativos y que la Ley prohíbe beneficios para presos por delitos contra la integridad sexual. Este sábado dejó la granja donde pasaba sus últimos meses recluido y se encontró con su pareja, Moyano. La mató y dejó un mensaje escrito en su espalda.
“Ella iba a encontrarse con él para finalizar la relación y él la asesinó y regresó a dormir a su lugar de detención, como si nada”, explicaron fuentes oficiales a Infobae como actuó el presunto femicida que no debía estar libre.
“Un abusador, reincidente y ahora femicida con salidas transitorias, pese a los informes técnicos negativos. Una víctima que no fue protegida”, tuiteó la ministra de Seguridad de nuestra provincia, Mercedes Rus. Su posteo surgió tras la conmoción que generó el hallazgo del cuerpo de Moyano en unos yuyos linderos al predio de una papelera del departamento de Las Heras, cercanos al domicilio de Molina.
“La mató y le dejó escrito en la espalda que era por celos, porque ella estaba con otro”, confiaron quienes vieron el cadáver de la mujer. Su cuerpo fue hallado por policías que patrullaban la zona este domingo por la mañana.
Previo al hallazgo, los familiares de la víctima habían hecho la denuncia por averiguación de paradero porque Flora no había regresado el sábado a su casa y temían por ella. “Molina no estaba apto para dejar la cárcel y, así y todo, lo soltaron”, señalaron las fuentes consultadas.
En ese marco, las salidas transitorias se las concedió la jueza Mirna Elisa Montaldi. Los profesionales que evaluaron a Molina en la cárcel dieron informes negativos con respecto a su liberación y el artículo 72 de Código de ejecución de la pena privativa de la libertad de Mendoza reza que no pueden acceder a beneficios reincidentes y quienes hayan sido condenados por delitos contra la integridad sexual, entre otros.
Sin embargo, Molina, que fue condenado por abuso sexual con acceso carnal de su hija de 17 años con la que vivía, logró el beneficio de las salidas transitorias y mató a Flora.
La mujer aparecía en los registros de las visitas del Servicio Penitenciario mendocino como su pareja.
Justamente, en los informes técnicos que desaconsejaban que dejara la granja se informó: “Persiste un discurso con distorsiones cognitivas y mecanismos defensivos, entre los que sobresalen negación al expresar ‘tuvimos sexo’, transmitiendo la idea de que existió consentimiento por parte de la víctima“.
La psicóloga que lo entrevisto señaló: “Al referir ‘habíamos estado tomando los dos, yo estaba tomado, ella estaba tomada, habíamos hecho un cóctel’; minimización la gravedad del accionar... Denotando un notable desprecio hacia la damnificada... Sin lograr dimensionar la magnitud real del mismo, esto es, el daño ocasionado a la víctima".
Ante esto, consideró "no beneficioso para el futuro personal, familiar y social de la persona privada de la libertad el otorgamiento de las salidas transitorias". Por su parte, la trabajadora social advirtió que estimaba desfavorable las condiciones del contexto socio-familiar.
Molina era un reincidente. Además de la condena de 2015 por violación, según el SIA (Sistema Integral de Antecedentes) del Ministerio de Seguridad y Justicia de Mendoza, acumulaba:
Por último, Molina fue detenido este domingo en la granja a la que volvió tras el femicidio por el que se le acusa. Allí lo detuvieron y ahora quedará alojado en el penal del Complejo Penitenciario N°1 Boulogne Sur Mer en una causa que investiga el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello por el delito de femicidio, que tiene perpetua como pena en expectativa.