19 de octubre de 2025 - 00:10

Estatus de Ley Bases y ruido en la gestión

Alfredo Cornejo no perdió protagonismo en la semana y sobre el final de la misma se expresó en la jornada de cierre del Coloquio de IDEA apuntando a la necesidad de consensos políticos a nivel nacional.

Luego de una semana cargada de tensiones por las conversaciones y negociaciones de Milei y su séquito en Estados Unidos, desde las provincias los principales referentes se encaminan a definir posiciones pensando en el día después de las cercanas elecciones.

Por un lado, los referentes del espacio Provincias Unidas (los gobernadores de Córdoba, Santa Fe, Chubut, Santa Cruz, Jujuy y Corrientes) parecen dispuestos a encarar una postura de oposición nacional razonable pero exigente a la vez, totalmente alejada del kirchnerismo, que tiene como objetivo máximo, según lo que dicen, competir en las presidenciales de 2027.

Saben estos seis gobernadores de distintos espacios que, más allá de los resultados de estas legislativas, habrá dentro de dos años dos polos bien opuestos: el libertario y lo que siga representando del justicialismo. Por lo tanto, armar una tercera opción con pretensiones no será fácil a primera vista. O dependerá, en todo caso, de cómo sean los apoyos legislativos que llegue a consensuar Provincias Unidas con el oficialismo para garantizar gobernabilidad y, a partir de ahí, cómo diferenciarse ante el electorado.

Mientras tanto, Alfredo Cornejo no perdió protagonismo en la semana y sobre el final de la misma se expresó en la jornada de cierre del Coloquio de IDEA apuntando a la necesidad de consensos políticos a nivel nacional, como le reclaman históricamente todos los dirigentes políticos y empresariales razonables a Milei y su entorno. Y como le recomendaron también desde la Casa Blanca, vale recordarlo.

En un panel que compartió con sus pares Frigerio y Zdero, con los que conforma, en la práctica, el único sector de gobernadores provinciales directamente aliados al oficialismo, Cornejo volvió a insistir con las reformas estructurales que requieren los sectores de la economía que están de acuerdo con los planes del Gobierno, pero que no ven avances, como quedó manifestado en IDEA. Totalmente en línea con lo que pidió esa organización desde al arranque de sus jornadas.

En estos aspectos Cornejo está muy cerca de los principales preceptos de sus pares ahora nucleados en Provincias Unidas. Lo diferencia haber llegado a un acuerdo electoral, como también lo hicieron sus colegas entrerriano y chaqueño, que en el caso de Mendoza puede reportarle un triunfo amplio y compartido con el ala libertaria, según la mayor parte de las encuestas. Pero el parentesco parece existir. Cierta sombra de lo que fue Juntos por el Cambio suele aparecer en ocasiones.

Pero el mandatario mendocino insiste en que la colaboración entre la Nación y las provincias es esencial para poner en marcha una legislación de largo plazo que modifique las actuales trabas. Y con ese enfoque recomendó públicamente restablecer “el estatus político de la Ley Bases, que fue el mejor momento político del gobierno”, sentenció Cornejo.

Claro, para ello se requerirá, vale reiterarlo, un apoyo político que, a simple vista, e independientemente del resultado electoral próximo, deberá tener el soporte de espacios no directamente alineados, como ocurre con el radicalismo de Mendoza y Chaco o el Pro de Entre Ríos. Están aliados electoralmente, pero mantienen sus autonomías como espacios.

Mientras tanto, previo al evento de IDEA, Cornejo mantuvo una semana muy activa, como casi todas en el largo camino a las elecciones. Y de algún modo llamó a sus seguidores a no quedarse quietos. En el marco de un congreso que se encontraba inaugurando, el Gobernador dijo que en base a su trayectoria política y como funcionario siempre tiene “un poquito de temor a las elecciones de medio término, porque meten ruido en el medio de la gestión”.

Refiriéndose concretamente al plano nacional, reiteró que un triunfo del oficialismo “daría tranquilidad económica al país”. Y añadió que si el Gobierno fracasara el domingo 26 sería difícil buscar esa estabilidad económica y el crecimiento anhelados. E hizo otro fuerte reclamo en línea con lo que piensa como gobernante de una provincia: “Todo lo que sirva para estabilizar la macroeconomía, bienvenido sea”. Postura preventiva ante una eventual disminución de votos con respeto a la elección anterior.

Volviendo a ese cierto temor de Cornejo, en realidad como gobernador no le fue mal con las elecciones legislativas que afrontó con su espacio durante su primer mandato. Cambia Mendoza se impuso en 2017, cuando continuaba en alianza política y electoral con el macrismo a través de Cambiemos.

En esa convocatoria también se trató de elecciones provinciales unificadas con las nacionales. En aquella elección el oficialismo local obtuvo 3 de las 5 bancas en juego para la Cámara de Diputados en el Congreso, con 45 por ciento de los votos. Fue la jornada en la que sorprendió José Luis Ramón, con su movimiento Protectora, resultando también electo para el Congreso con la quinta y última banca en juego. La restante fue para el peronista Omar Félix.

A nivel provincial esa victoria fue destacada, pero tal vez no tan contundente como hubiesen deseado en el cornejismo. Aunque aquella vez Alfredo Cornejo agradeció públicamente lo que llamó “enorme espaldarazo”.

En realidad, había logrado cortar una racha adversa de los gobernantes de turno en las legislativas. Desde 1997 hasta 2013 Arturo Lafalla, Roberto Iglesias, Celso Jaque y Francisco Pérez habían sufrido derrotas electorales al promediar sus respectivos mandatos. Y en la mayoría de los casos la sucesión de cada uno de ellos recayó dos años después en un dirigente de otro espacio. Jaque fue la excepción.

Lo que se debe tener en cuenta es que las elecciones legislativas tienen siempre el beneficio de que permiten evaluar la calidad de la gestión de turno y, en base a esa evaluación, avalar lo actuado o expresar rechazo o necesidad de ajustes. Y aun con una victoria, si la cifra obtenida por el espacio que gobierna o la distancia con los rivales no son amplias, la elección se transforma en un llamado de atención de la ciudadanía que merece ser escuchado.

Como señalamos, probablemente ese nerviosismo expresado por el Gobernador sobre lo que puedan arrojar los resultados el próximo domingo sea preferentemente una voz de alerta para que en la dirigencia nadie se conforme con lo hecho.

Es que la necesidad de gobernabilidad es fundamental para la segunda parte de este mandato constitucional de Cornejo. Su principal campaña y su objetivo electoral es la conformación de la Legislatura que lo acompañará hasta 2027. Con más razón si en el global nacional el gobierno libertario no obtiene un resultado del todo favorable.

* El autor es periodista. [email protected]

LAS MAS LEIDAS