Las "uñas princesa" son la tendencia y el equivalente más suave a las uñas de jabón, que buscan un aspecto limpio y natural. Adoptan el mismo enfoque minimalista que las uñas de cristal y aunque usan los mismos tonos suaves que las uñas BB cream, se inclinan más hacia los nudes rosados.
La diferencia clave radica en la forma y el largo de las uñas. Las uñas princesa suelen ser cortas y ovaladas antes de ser rematadas con un esmalte neutro. Su nombre hace referencia a la princesa de Gales, Kate Middleton, quien suele llevar uñas cortas y cuadradas con un esmalte casi imperceptible para sus deberes reales.
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Su nombre hace referencia a la princesa de Gales, Kate Middleton.
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Cómo conseguir uñas de princesa
Si bien las uñas de princesa parecen muy simples, para lograr este estilo elegante y minimalista hace falta un pequeño trabajo de preparación. Primero, recorta las uñas en línea recta para crear puntas cortas. Luego, lima el borde superior de la uña en línea recta antes de redondear los bordes para crear una uña con una parte cuadrada y otra ovalada.
Llevar las cutículas impecablemente hacia atrás es un paso imprescindible. Ahora es el momento de aplicar una capa base y una o dos capas de esmalte nude o rosa suave para crear un acabado natural y propio de la realeza.
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El brillo rosado te deja las uñas de princesa.
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Aunque las uñas de princesa son sinónimo de lujo discreto, son también económicas, discretas y de bajo mantenimiento. En otras palabras, las uñas de princesa son una excelente manicura de para quienes desean uñas de apariencia costosa sin tener que desembolsar dinero en múltiples visitas al salón. Es que permiten alargar el tiempo entre citas a la peluquería.
¿Cuál es su mayor atractivo? El brillo rosado que deja la manicura de princesa te da un aspecto impecable, igual que si llevaras maquillaje natural en los días soleados.