La Noche de las Ideas tendrá su estreno esta noche con la presentación de Christophe Ventura, un reconocido politólogo francés, director de investigación en IRIS (Instituto Francés de Asuntos Internacionales y Estratégicos), que se ha especializado en América Latina. Sus temas son el mundo multipolar, los movimientos sociales y las sociedades civiles. También es periodista de Le Monde Diplomatique , revista en la que ha escrito sobre los acontecimientos políticos, económicos, sociales y geopolíticos de la región desde principios de la década de 2000. Y ha tenido protagonismo en la organización de los Foros Sociales Mundiales desde su creación en 2001 (Porto Alegre, Brasil). Es autor de libros como Geopolítica de América Latina (Éditions Eyrolles/IRIS, 2022) y coautor, con Didier Billion, de De-Occidentalización. Repensando el orden mundial (Agone, 2023). Los Andes pudo entrevistar a Christophe, recién llegado a Argentina, con la intención de que nos anticipara algunos de los temas sobre los que se explayará en la charla de esta noche que, justamente, lleva el título de su reciente libro.
Y nosotros trabajamos sobre eso y estamos tratando de mostrar cómo hoy en día, en muchos aspectos de la vida internacional, hay países, coaliciones de países del sur que están armando un nuevo balance general, un nuevo balance de fuerza. Se trata de la voluntad de nuevas potencias emergentes —tipo Brasil, Argentina, China, Rusia, Turquía, etcétera—, que quieren precisamente cambiar el modelo del sistema post Segunda Guerra Mundial por un modelo multipolar que toma en cuenta el nuevo balance de fuerza, el nuevo peso geoeconómico de esos países. Sería un mundo en el cual potencias regionales podrían compartir la influencia y el poder internacional.
Estamos en este mundo donde nadie tiene la posibilidad de una hegemonía total a nivel mundial. Estamos en una transición indeterminada en la cual hay que seguir bien los balances de fuerzas.
Argentina en la "transición indeterminada"
—Me llamó la atención que citaras entre los países que están impulsando la multipolaridad a la Argentina, cuyo gobierno no hace tanto renunció a los BRICS y se alió incondicionalmente a los Estados Unidos de Trump…
—Creo que el caso argentino nos enseña justamente que estamos en ese momento de transición indeterminada. Y muestra por qué no se puede decir que ya estamos en un mundo multipolar. Es que precisamente con el gobierno de Javier Milei, la Argentina rompió con esa trayectoria que tenía desde el inicio del siglo XXI, que estaba, como otros países de la región latinoamericana, tratando de orientarse hacia una diversificación estratégica, una diversificación de las alianzas de Argentina a nivel económico, a nivel comercial, a nivel financiero.
Y eso fue la trayectoria después de la gran crisis del 2001 y durante todo el ciclo kirchnerista. La ruptura viene con Milei, que es muy reciente. Y que nos enseña que precisamente hay de nuevo una bifurcación. Argentina de nuevo quiere, al contrario, asumirse como una potencia de la “reoccidentalización” del mundo. Pretende inscribirse como actor de un realineamiento occidentalista, de una alianza con principales socios como Estados Unidos e Israel, que son punta avanzada de Occidente en contra de otras potencias y civilizaciones que pretenderían debilitarlo. Y nos muestra, de paso, cómo en los escenarios nacionales hay momentos en los cuales los países pueden tener gobiernos que quieren reaccionar.
La discusión sobre el "fascismo"
—Desde Argentina lo que estamos percibiendo con inquietud y algún escalofrío es que Milei lleva a nuestro país a una situación de, digamos, neo coloniaje.
—Pienso que, efectivamente, lo que planteas es el riesgo de un retroceso de Argentina a una situación subalterna. Dentro de una alianza liderada por Estados Unidos, y eso significaría la oferta del país a las empresas norteamericanas, con la entrega de todas sus riquezas. Sí, obviamente, eso significaría un regreso a una situación anterior.
—También lo que se percibe es una especie de ofensiva o contraofensiva global de la derecha y circula mucho la palabra fascismo o neofascismo. ¿Qué piensan ustedes de este tema?
— Hay una discusión abierta sobre este tema del fascismo. Creo que el proyecto del presidente Milei es más un proyecto de “neoliberalismo radicalizado 2.0”. Es decir: hacer lo que se intentó hacer en el pasado, pero hasta el final. Con esa idea que no funcionó porque había demasiadas resistencias, había demasiados límites para asegurar un éxito de esas políticas. Creo que esa es la visión de Milei, un neoliberalismo 2.0 radicalizado, listo para asumir el precio y el riesgo social.
El precio es reprimir el cuerpo social, a causa del deterioro de la cuestión social, de la situación de las mayorías. No sólo sectores populares sino también clases medias. No lo veo como una destrucción del Estado. Lo veo más como una transformación del Estado para, digamos, servir a ese proyecto neoliberal radicalizado. Lo que lleva a asumir una dosis de autoritarismo y de represión del cuerpo social.
No sé si a este punto se le llama fascismo, porque fascismo tiene que ver con también una matriz que es una revolución negra. Una revolución ideológica con visión totalitaria.
—Igual un componente que pareciera nuevo es que esta suerte de totalitarismo no es del Estado, sino de las corporaciones y las empresas…
—Sí, claro, verdad… Es un tecno autoritarismo, ¿no? Estamos en eso, es decir, un autoritarismo con alianza estatal, de las empresas tecnológicas y del capital. Es una especie de nueva alianza, una nueva forma, digamos, de poder, que vemos en todos los países. Es un tríptico, con poder político, poder tecnológico y poder de las corporaciones. Claramente son los actores en movimiento para imponer este tipo de proyecto.
La pérdida de la esperanza
—Y ante esa marea abrumadora, ¿cuál es la reacción que ves de la gente de a pie, de lo que se llama “el pueblo”?
—Lamentablemente la situación está muy difícil porque, bueno, vivimos una crisis de largo plazo. El mundo vive una crisis que ha tenido varias formas, pero digamos que, desde el 2008 más o menos, después de la “globalización feliz” de los años 2000, del ciclo de expansión mundial del libre comercio, etc., ha sido un desastre para todos. La crisis financiera de 2008 es un evento capital, cardinal, crucial para entender que las tendencias políticas y los nuevos tipos de régimen que estamos viviendo son producto de esa crisis de largo tiempo, que ha cambiado totalmente el escenario mundial en términos de performances económicas de todos de los países del norte, pero también del sur. Todo se redujo y hubo retroceso social en todas partes.
Los pueblos han perdido esperanza, ese es el problema. Es que para las crisis económicas y sociales no se encontraron soluciones por parte de los políticos. Los problemas empeoraron en todas partes y luego vino el Covid. Es una acumulación de crisis que al final produjo una desilusión política muy fuerte.
La idea de que los políticos no pueden solucionar nada, que los poderes reales están afuera de los gobiernos, afuera de lo político, y eso es muy malo, porque vivimos en un mundo en cual no tenemos grandes imaginarios solidarios que reemplacen lo que fue el rol del socialismo en contra del capitalismo. Y la gente intenta sobrevivir en este mundo tan amenazante y tan complicado, sin proyecto que supere la crisis capitalista, y es por todo eso que, finalmente, se imponen las soluciones individualistas, personales, para encontrar una solución en este caos. Creo que eso ayudó mucho a la emergencia de poderes del tipo “trumpista”, o como el caso de Milei.
No significa esto que no hay propuestas, que no hay espacios innovadores en las sociedades, donde nuevas relaciones sociales están emergiendo. Hay muchas cosas en las sociedades, hay muchos movimientos de resistencia, de alternativas, pero que son localizados, que son espacios limitados y que no tienen forma de proyecto a nivel nacional o global. Ahora estamos en eso.
La programación de la La Noche de las Ideas
Todas las actividades se realizarán en el Espacio Julio Le Parc (Mitre y Godoy Cruz, Guaymallén).
Domingo 11 de mayo:
-A las 18. Conversatorio y presentación del libro “Desoccidentalización: repensar el orden del mundo”. Modera: Aubin Caminade, con el invitado Christophe Ventura.
-A las 19.30. Muestra fotográfica de Daniel Barraco, “25 años de El truco de perder la infancia”.
-A las 20. Brindis de apertura de “La noche de las ideas”, con la Bodega Atamisque.
Lunes 12 de mayo
-A las 18. Mesa redonda “¿Cómo actuar por la biodiversidad en un paisaje vitivinícola? De la observación a la co-construcción de proyectos transdisciplinarios”, con la participación de: Mélanie Roy, Carina González y Daniela Mezzatesta. Moderadores: Andrea Fruitos y David José de la Cruz López.
-A las 19. Mesa redonda “¿Vivimos en la era de la desinformación? La información en el tiempo de productores de contenidos”, con Rubén Valle (diario Los Andes), Andrés H. Gabrielli (radio Nihuil) y Pablo Icardi (MDZ), moderada por Luis Ábrego.
-A las 19.30. Charla con Laurent de Sutter “L’art de l’ivresse – El arte de la embriaguez”.
-A las 20. Cine debate “Era del Clash: jóvenes, credibilidad y redes sociales en debate”. Película: Arthur Rambo.
Martes 13 de mayo
-A las 10 y a las 15. Cine debate con la misma película de la actividad anterior.
-A las 18. Charla “La cooperativa de datos: una herramienta para optimizar políticas públicas en sectores vulnerables.” Invitado: Mauricio Boretto.
-A las 20. Brindis con la bodega Piedra Negra.