Juliana “Furia” Scaglione, conocida por su paso por Gran Hermano, supo mantener su capacidad para generar controversia tanto dentro como fuera del reality.
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Juliana “Furia” Scaglione, conocida por su paso por Gran Hermano, supo mantener su capacidad para generar controversia tanto dentro como fuera del reality.
Tras su salida de la televisión, Scaglione se lanzó al mundo del streaming, un espacio en el que las restricciones son menores y donde no dudó en atacar a quienes la criticaron. Entre sus declaraciones más explosivas, apuntó contra figuras del espectáculo.
Furia, que no ha tenido las opciones que el resto de sus ex compañeros, apunta que hubo quienes la perjudicaron laboralmente, mencionando específicamente al manager de María Becerra, José Levy.
Furia aclaró sus críticas anteriores a La Nena de Argentina y reconoció que hubo un “malentendido”. Según explicó, esto surgió a raíz de la supuesta ausencia de la artista en un evento multitudinario, pero lo que realmente le molestó fue que, a su entender, su representante “robó” ideas y conceptos que ella había desarrollado. “María está siendo mal asesorada”, aseguró.
Luego, la doble de riesgo destacó su admiración por María, a quién considera una persona que comenzó desde abajo, al igual que ella. Sin embargo, expresó su preocupación por la influencia que podría estar recibiendo de su entorno.
“El problema es cuando le dicen lo que tiene que decir en los eventos, como ‘¡Vamos mis furiosas!’. Eso no es algo que María diría por su cuenta, está mal asesorada”, insistió Furia.
Minutos después Juliana afirmó: “La realidad es que me inspiraron desde adentro. Robaron muchas cosas del formato y de otras personas para hacer negocio y no se hacen cargo.
Es importante recordar que, a principios de este año, María Becerra se volvió viral por un gesto que muchos interpretaron como un guiño hacia Juliana. Durante su primer recital en el estadio Monumental, Becerra dijo: “Vamos a perrear, furiosos”, una frase que provocó revuelo entre los seguidores de Scaglione.
Por otro lado, en su presentación en Viña del Mar, María Becerra realizó el arco de Artemisa, un gesto emblemático que había popularizado Coy, la hermana de Juliana, durante su ingreso a la casa de Gran Hermano en la edición Congelados.