La salud del rey Carlos III despertó las alarmas en el Reino Unido desde que se supo a comienzos de año que batalla contra el cáncer, la misma enfermedad que afectó hasta hace unas semanas a su nuera Kate Middleton, princesa de Gales.
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La salud del rey Carlos III despertó las alarmas en el Reino Unido desde que se supo a comienzos de año que batalla contra el cáncer, la misma enfermedad que afectó hasta hace unas semanas a su nuera Kate Middleton, princesa de Gales.
El último tiempo se intensificaron los rumores sobre su condición, debido a que en el Palacio de Buckingham actualiza periódicamente el protocolo para lo que sería el funeral del monarca.
El rey Carlos III tiene 75 años y si bien se sabe poco de su enfermedad, suele querer llevar tranquilidad, yendo a eventos o mostrándose con su esposa.
Como ocurre con cada monarca, el sucesor en el trono de Isabel II, la royal con el reinado más de la milenaria monarquía británica, con 70 años, tiene sus propios lineamientos para el día en el que muera.
La madre del rey Carlos III, tuvo el primer funeral real en siete décadas, desde la muerte de su padre, Jorge VI en 1952, por lo que ver una ceremonia de funeral, no es algo frecuente en las nuevas generaciones.
Carlos comparte con su madre una denominación similar a la que se utilizó con para anunciar su muerte. La frase en clave para Isabel II fue “El puente de Londres ha caído”. De hecho, la prensa la había filtrado mucho antes del 8 de septiembre de 2022, cuando Isabel murió a los 96 años.
En el caso de Carlos, se habla de la Operación Puente Menai. El nombre remite a un puente colgante en Gales, que podría estar personificando al monarca.
De este modo, el día en el que Carlos III fallezca, se harán los comunicados oficiales, se pondrán los listones negros en los medios oficiales y la frase seriá “el puente de Gales ha caído”.