El futuro de Christian Horner en la Fórmula 1 podría ser más explosivo que su salida de Red Bull, donde fue jefe de equipo durante 20 años. Según reportes de Europa, Horner no solo busca regresar a la Máxima, sino que quiere hacerlo como dueño.
F1. Tras su polémica salida de Red Bull, Horner negocia comprar acciones de Alpine. Busca un rol de dueño, como Toto Wolff en Mercedes, y volvería en 2026.
El futuro de Christian Horner en la Fórmula 1 podría ser más explosivo que su salida de Red Bull, donde fue jefe de equipo durante 20 años. Según reportes de Europa, Horner no solo busca regresar a la Máxima, sino que quiere hacerlo como dueño.
Todas las miradas apuntan a Alpine, una escudería que atraviesa una severa crisis: cerró la temporada 2025 en el último lugar del Mundial de Constructores.
Horner estaría en conversaciones con el Grupo Renault para adquirir una porción del paquete accionario de la escudería francesa con base en Enstone.
La ambición del británico es clara: quiere tener una participación accionaria, un rol similar al que ejerce su antiguo rival Toto Wolff en Mercedes. El principal objetivo de Horner es adquirir el 24% de las acciones que actualmente pertenecen al consorcio estadounidense Otro Capital.
Aquí radica el dato más impactante: este grupo inversor cuenta entre sus filas con figuras de Hollywood y del deporte, como el actor Ryan Reynolds, el golfista Rory McIlroy y el boxeador Anthony Joshua.
Si esta adquisición se concreta, el exjefe de Red Bull obtendría un pie en la puerta de un equipo que, además, cambiará sus motores Renault por propulsores Mercedes a partir de 2026.
La negociación se ha facilitado por la excelente relación personal que Horner mantiene con Flavio Briatore, quien regresó a Alpine como asesor ejecutivo y hombre fuerte del equipo. Briatore ya ha tomado decisiones clave, como la confirmación de Franco Colapinto como piloto para 2026.
Es fundamental recordar que Horner abandonó Red Bull con una indemnización millonaria que rondó los 80 millones de libras esterlinas. Este capital le permite perseguir su meta de convertirse en accionista de un equipo.
Sin embargo, su vuelta al mando no será inmediata: debe cumplir con el periodo de inhabilitación (gardening). Por esta cláusula, no podría tomar injerencia en las decisiones hasta la primavera de 2026.