La senadora Beatriz Rojkes de Alperovich disparó ayer dos definiciones que tuvieron un inmediato eco crítico, ya que la esposa del gobernador de Tucumán rozó la discriminación hacia los pueblos originarios y naturalizó la violencia de género con un polémico concepto hacia otra legisladora.
Hablando sobre las elecciones del domingo, la senadora planteó ante radio del Plata que esa provincia “ha tenido que vencer que digan que era inviable” y sobre la quema de urnas expresó: “Pienso que nos están subestimando mucho, los tucumanos no somos indios, ni salvajes, ni ladrones”.
Luego, en la sesión del Senado, Rojkes apuntó a su par Silvia Elías de Pérez a quien llamó “pobre mujer” y “víctima” de violencia de género. Tras la mención, la senadora abundó en detalles y señaló que la felicitaba por haber sido electa como legisladora, “a pesar de todos los maltratos que ha sufrido y que le encanta porque la violencia se da de a dos, es como un matrimonio de violentos y de golpeados”.
