Este año, la cosecha de ciruela fue muy baja, porque las heladas, el Zonda y el granizo impactaron en la producción. Esto hizo que, después de que, en diciembre, la Dirección de Agricultura pronosticara que se iban a obtener 96.742 toneladas frescas (32 mil toneladas de ciruelas secas), apenas se llegara a unas 40 mil frescas. El sector aguarda con expectativa que se apruebe el protocolo fitosanitario para poder exportar a China.
El presidente del Clúster de Ciruela Industria de Mendoza y gerente de la Asociación Argentina de Ciruela Industria (AACI), Oscar Morbidelli, comentó que, años atrás, la superficie cultivada en la provincia pasó de 10 mil hectáreas a 18 mil, porque llegaron inversiones, algunas incluso con tecnificación. Pero que, como no se habían identificado mercados de destino, esas 8 mil hectáreas nuevas se perdieron. Estima que, de lograr ingresar a China, se podría llegar a las 20 mil de ciruela en Mendoza.
- Se había estimado una cosecha de 96 mil toneladas, ¿qué pasó finalmente?
- A finales de noviembre o diciembre siempre se hizo una primera aproximación al pronóstico y se ajustaba en enero, un poco más cerca de la cosecha. Pero todos sabíamos que, con suerte, se iba a llegar a las 50 mil toneladas. Y después nos encontramos con que en el Este se cosechó mucho menos de lo esperado. No sé si se alcanzó el 30% del año pasado. Y acá (en el Sur), hubo algunas heladas, viento Zonda y granizo muy fuerte en Real del Padre. Creemos que no hay más de 40 mil toneladas.
No hubo problemas de agua, porque nevó mucho en la cordillera, que en años anteriores se había complicado el riego. Pero hubo fincas en las que no se realizó el laboreo cultural y el promedio de rendimiento fue de 4 toneladas por hectárea, que es muy marlo, porque con buena cosecha, llegamos a 10 u 11. Y lo aspiracional son 25 a 30 toneladas por hectárea.
Eso da una idea del estado de los cultivos, que no es de este año, ni del pasado, sino que es una cuestión de arrastre de mucho tiempo, de alguna rentabilidad esporádica en el tiempo, pero que no logra mantenerse.
O. Morbidelli: “Abrir mercados nos permitiría generar riqueza y crear puestos de trabajo”
- ¿A qué se debe esta baja rentabilidad?
- No conseguimos entrar a mercados A, por distintos motivos. Estamos por entrar al mercado chino. Mucha producción del año pasado se exportó a Chile, para que de ahí saliera a China, porque ellos tienen arancel 0% y los protocolos fitosanitarios acordados. Pero en Chile no se seca en horno, porque es muy caro, sino al sol, y eso no les gusta tanto a los chinos.
Hemos iniciado el trámite para poder exportar a China ciruela fresca y seca, hace 6 y 5 años, respectivamente. Y estamos a punto de que se autorice para la seca. Hace un mes nos visitó el secretario de Agricultura de ese país y les dieron vía libre a los frutos secos. Se habló de ciruela desecada y parece que en abril o mayo nos visitaría el ministro de Agricultura. Veremos si podemos hacer gestiones para que esté listo y firmado el protocolo, lo cual significaría un salto cualitativo por los precios y cuantitativo por las cantidades posibles.
Lo mejor es que es muy fácil que esos precios más elevados se transmitan a los productores, porque el chino viene no solo hablar con exportadores sino con los secaderos intermedios que estén condiciones de vender.
- ¿En Mendoza sí se seca en hornos la ciruela?
- Sí. Y es una ventaja enorme. Y tenemos el tema de la ciruela fresca, que el único consumidor en el mundo es China. Este año, Chile año exportó 50 mil toneladas en fresco, que es toda nuestra producción. Los precios pagados al productor desde ese país han sido este año de US$ 1 a US$ 1,10, cuando hoy se paga en Argentina, como mucho, US$ 0,30.
Lo que no hicimos el año pasado fue reunir el dinero para pagar la auditoría china. Iban a aportar tres provincias -Mendoza, Neuquén y Río Negro-, pero no se pusieron de acuerdo. Había que confirmar en noviembre para que vinieran en enero. Este año esperamos tenerlo definido en junio o julio, porque podrían venir en enero de 2026 y después hay que esperar que se firmen los protocolos fitosanitarios. Pueden pasar dos años a partir de ahora, lo cual es muy malo.
Pero si se abre para la seca ya es un súper mercado. Y más, si logramos que se eliminen o bajen los aranceles de importación, porque hoy nuestro principal mercado es Brasil, que es clase B y no paga lo que hay que pagar. Pero no tenemos salida, porque no podemos entrar a Europa, ni Estados Unidos (que encima nos ha puesto un 10%), ni México, que son mercados que pagan el doble y admiten ciruela procesada, lo que implica sumar valor agregado.
Con secaderos saturados, se pierde parte de la ciruela
- Sería un salto productivo importante…
- No quiero ser súper optimista, pero si abrimos el mercado chino de las 10 mil hectáreas que tenemos, de las cuales 3 mil se cultivan o no según el año (y rinden así), podríamos pasar 20 mil. Lo cual nos llevaría a ser la segunda actividad lejos en exportaciones, después del vino. Ahora peleamos palmo a palmo con el ajo y en una buena cosecha estamos por arriba.
- ¿Se puede entrar al mercado chino con la producción actual o habría que crecer antes?
Chile empezó con mil toneladas al año; con nada. En las fincas se invierte si hay rentabilidad, pero para eso hay que tener mercado. Si no, pasa como cuando crecimos de 10 mil hectáreas a 18 mil y las perdimos por no tener claro el destino. Esas 8 mil hectáreas implantadas, algunas con tela, representan US$ 300 millones que se perdieron. Por eso nos hemos reunido en un clúster, para ponernos de acuerdo en un plan estratégico.
Un tema fundamental para el productor es mecanizar la cosecha, porque la manual se lleva hasta 40% del precio de venta. Pero no puede invertir si no sabe a qué precio va a vender. Lo mismo pasa con los sistemas de riego, que también son muy efectivos para el combate de heladas y para bajar la temperatura en el huerto cuando sopla Zonda en el momento de la floración. En el mundo hay financiamiento gratuito, por el cambio climático y para favorecer un mejor uso del agua, pero se debe armar un proyecto integral y los mercados son fundamentales.