En la misma línea, Carolina Aguilar, directora de Turismo de Tupungato, destacó el valor de realizar este evento en un lugar emblemático tanto por su producción como por su potencial turístico. “La Carrera es una zona donde la papa se da por excelencia, con condiciones climáticas ideales. Pero además es un destino elegido por sus paisajes, su gastronomía y sus alojamientos. Hoy se suma un nuevo producto turístico: la papa y sus derivados. Este evento muestra cómo un cultivo noble puede convertirse también en una experiencia cultural y turística”, señaló.
Dia internacional de la papa
Al pie de la montaña nevada: primera edición de “Habemus Papas” realizada en Estancia Atamisque, La Carrera, Tupungato.
Conversatorio técnico: desmitificar la papa
El día abrió con el conversatorio técnico, un espacio de intercambio entre especialistas del INTA, representantes del sector privado y productores locales. Se abordaron aspectos productivos, nutricionales y comerciales del cultivo de la papa, con el objetivo de actualizar saberes y, al mismo tiempo, derribar mitos sobre este alimento clave en la dieta de los argentinos.
Del total cultivado en Mendoza, entre el 65 y el 70% se concentra en el Valle de Uco, principalmente en Tupungato, que se destaca por la papa de consumo en fresco, y San Carlos, más vinculado a la papa industrial. El departamento de Malargüe, por su parte, aporta a la producción de semillas. “A nivel provincial, el 50 al 55% de la papa sembrada es para consumo directo, un 20 al 30% para industria y entre un 10 y 15% para semilla. Mendoza tiene la cadena completa, desde semilla hasta consumidor final, y eso la convierte en una región estratégica”, explicó Federico Fuligna, jefe del INTA Tupungato.
Dia internacional de la papa
Roxana González, Claudio Galmarini, Mariela Díaz Sambueza y otro referente del INTA participaron del segundo conversatorio: La papa como alimento
A escala nacional, la superficie cultivada ronda las 85.000 hectáreas. El principal polo productivo es Buenos Aires, seguido por Córdoba y San Luis, luego el norte argentino, principalmente Tucumán, y en cuarto lugar se ubica Mendoza, con una participación cercana al 7%.
Otro punto clave del conversatorio fue el análisis de la diversidad varietal disponible. La papa spunta domina el mercado argentino, con un 80% de presencia. Ante esto, Fuligna remarcó que existen otras variedades con mejores cualidades culinarias, como sajita, asterix, quiniebec e incluso las de uso industrial como innovator o las llamadas “tipo russet”, que poseen mayor cantidad de sólidos solubles y menor contenido de agua, ideales para frituras.
“Es fundamental educar al consumidor para que aprenda a elegir la variedad según el uso que le va a dar, como hoy lo hace con el vino. Así como se distingue entre Malbec, Cabernet o Sauvignon Blanc, también deberíamos poder distinguir una papa para puré, para ñoquis o para freír”, propuso Fuligna.
También se habló del valor nutricional de la papa, muchas veces subestimado o descarta por las formas de cocción más difundidas. “La papa es un alimento saludable. Lo que muchas veces no es sano es el modo en que se prepara, por ejemplo, frita, pero no el producto en sí. Tiene nutrientes valiosos, es versátil y accesible”, agregó.
Dia internacional de la papa
Conversatorio "Habemus Papas"
Gentileza
Finalmente, Fuligna recordó que, a nivel global, la papa ocupa un lugar privilegiado en la alimentación humana, confirmando que “es uno de los tres cultivos más consumidos en el mundo, después del trigo y el arroz. Y es de los pocos que tiene su propio día internacional. Eso habla de su valor estratégico en la seguridad alimentaria mundial.”
Feria de sostenibilidad: producción con identidad y comunidad
Este espacio concentró experiencias productivas, educativas y comunitarias que pusieron en el centro el valor del territorio, la autogestión y la alimentación saludable.
Entre los proyectos presentes estuvo Crece desde el Pie, una organización compuesta por productores agroecológicos del Valle de Uco. Su participación fue clave para visibilizar una forma alternativa de producir y comercializar alimentos. “Crece desde el Pie es una organización horizontal, sin patrón y autogestiva. Defendemos la tierra, el agua y la producción de alimentos sanos para la comunidad. Participamos de este evento porque creemos en la importancia de estos espacios donde el alimento vuelve al centro”, explicó Laura Costela, integrante del colectivo. En su stand ofrecieron más de 90 productos no perecederos de elaboración propia, fortaleciendo los circuitos cortos de comercialización.
Por su parte, Verónica González, también integrante de Crece desde el Pie, destacó el trabajo conjunto con el INTA, especialmente en lo que respecta al intercambio y la conservación de semillas. “Estamos acá también por eso, para acompañar al INTA, con quien venimos trabajando hace años. Gracias a ese vínculo, seguimos fortaleciendo nuestras prácticas agroecológicas”, señaló.
Crece desde el Pie nació hace 16 años en el Valle de Uco y hoy cuenta con puntos de comercialización en varias provincias del país. “Se puede producir fuera del sistema, sin venenos, comer sano y vivir de lo que uno cultiva. Esa es la bandera que nos identifica”, concluyó Verónica.
Dia internacional de la papa
El stand de Crece desde el Pie en la Feria de Sostenibilidad: Laura Costela y Verónica González, integrantes de la organización.
Otro de los proyectos destacados fue el impulsado por la escuela Ricardo Palma, en articulación con Estancia Atamisque y vecinos de la zona. En este caso, niños y niñas de nivel primario presentaron su propio dulce de papa artesanal, un producto que ya se comercializa y que incluso ha sido premiado.
“El desarrollo comunitario es parte esencial de la identidad de Estancia Atamisque. Acompañar a la escuela, a los chicos, en un proyecto que los vincula con el alimento y con su territorio es algo que valoramos profundamente”, expresó Lelia Peloc, quien se desempeña en el área de turismo y eventos de la finca. Este proyecto involucra docentes, estudiantes, productores e instituciones locales que colaboran para sostener una iniciativa que aporta tanto a la educación como a la economía escolar, ya que los fondos obtenidos por la venta del dulce se destinan a materiales de estudio y mejoras para la escuela.
Dia internacional de la papa
Recetario de los niños y niñas de la escuela Ricardo Palma. Proceso de producción del dulce de papa: desde el pelado y rallado hasta la cocción y la prueba del dulce.
Feria gastronómica: en presencia de la alta cocina
La parte más sabrosa llegó al final y convocó a cocineros destacados por la Guía Michelin como Iván Azar (Casa Vigil), Josefina Diana y Juan Manuel Feijoo (Angélica Cocina Maestra), Matías Gutiérrez (Abrasado), Patricia Courtois (5 Suelos) y Patricia Suárez Roggerone, anfitriona del encuentro.
Patricia Courtois, chef ejecutiva de 5 Suelos, eligió preparar una receta clásica: sopa de papa y puerro. “Siempre digo que menos es más. Mi cocina parte de la simpleza y del producto. En este caso, una sopa tradicional francesa, con caldo de pollo para aportar valor nutritivo, donde la papa es la protagonista”, explicó.
Courtois destacó también el valor de sostener la diversidad alimentaria: “No podemos darnos el lujo de no usar productos tan maravillosos. Si el trabajo continúa, en unos años vamos a tener estas papas andinas en las verdulerías de todo el país”, señaló. La chef también puso en valor la articulación con las escuelas, al enterarse del proyecto que presentaron los alumnos de la escuela Ricardo Palma, quienes presentaron el dulce de papa. “Me pareció increíble. Es muy valioso que los chicos puedan experimentar, crear y producir con un alimento tan nuestro”, afirmó.
Desde el INTA, Federico Fuligna subrayó que la gastronomía es una herramienta clave para educar al consumidor sobre las múltiples variedades de papa que existen más allá de la spunta, la más común en el mercado. “La gastronomía puede ayudar a construir esa conciencia y esa cultura”, expresó.
Dia internacional de papa
Papa para todos los gustos: muestra con carteles identificatorios colocada en el ingreso de la estancia Atamisque.