A sus jóvenes 17 años, el mendocino Lautaro Arjona, buscará en unos días romper un récord mundial en natación. En dos semanas se zambullirá en las aguas del Río de la Plata, el más ancho del mundo, para unir las costas de Uruguay y Argentina.
Es considerada una de las pruebas más desafiantes en el mundo. Poco más de 40 personas lo han logrado. Lautaro entrena todos los días mientras cursa 5°año.
A sus jóvenes 17 años, el mendocino Lautaro Arjona, buscará en unos días romper un récord mundial en natación. En dos semanas se zambullirá en las aguas del Río de la Plata, el más ancho del mundo, para unir las costas de Uruguay y Argentina.
Se trata de los 44 km que separan Colonia de Sacramento (Uruguay) hasta Punta Lara (Argentina).
Según él mismo relata, y destacan los conocedores, se trata de uno de los mayores desafíos en el mundo en natación en aguas abiertas. Pero además de esto él va por más: busca romper el récord mundial y ser el más joven en lograrlo. Si bien hubo intentos de realizar antes la hazaña, la primera persona que lo cruzó fue quien incluso hasta hoy es la más joven en haberlo hecho. Se trató de una chica, tenía 19 años y nadie más joven lo hizo. Se trató de la nadadora argentina Lilian Harrison quien marcó este hito el 21 de diciembre de 1923.
Ahora, Lautaro va tras su anhelo, a lo cual le ha puesto cuerpo y alma con un exigente entrenamiento.
Sin voluntad no hay forma de lograr tal cosa, pero tampoco sin el apoyo, sobre todo de su familia, que de lunes a viernes, a las 4 AM arranca su jornada para que el joven pueda entrenar como se necesita. Es que Lautaro pasó a quinto año del secundario en la escuela San Luis Gonzaga, de Ciudad a la que asiste por la mañana. Pero su entrenamiento requiere de dos “zambullidas” diarias, entre otras cosas, por lo que lo hace antes de entrar al colegio y cuando sale.
“Son dos turnos diarios, que serían diez turnos por semana, de diez kilómetros cada uno”, detalla el chico en diálogo con Los Andes y cuenta que el que lo lleva de lunes a viernes es su papá, Oscar. Además requiere otras actividades como gimnasio. Así las cosas, claro, termina agotado. Sin embargo, el sábado también entrena aunque comentó que el domingo es el día que duerme. Incluso que a veces se toma unas mini vacaciones durante el año. Claro, no hay cuerpo que aguante.
Comenzó a nadar a los 10 años, en el club Regatas y desde hace dos se entrena para este desafío, siempre en el mismo club. “Arranqué a nadar para aprender, porque me gustaba mucho ir a la playa y estar en el agua, entonces era peligroso; tenía que aprender mínimamente, me fueron subiendo y después me terminé quedando porque me gustó”, recuerda.
Respecto de la prueba relata: “Lo había pensado con 15 años, pero no se había podido porque no tenía el estado físico en ese momento y la experiencia de nadar en agua abierta. Entonces fui entrenando y fui capacitándome, corriendo otras carreras, para ya hoy, dos años después, poder intentarlo”, relata antes de afirmar: ”Calculo que en ese momento no hubiera podido porque creo que era bastante”.
Sostiene que no le da miedo pero es consciente del desafío: “Si, me da un poquito de nervios, de ansiedad, de lo que vaya a costar”.
Durante este tiempo ganó experiencia en sitios locales como los diques Carrizal y Potrerillos, en algunos lugares de Buenos Aires y Entre Ríos. Pero hasta ahora, no ha nadado en el Río de la Plata.
La prueba está planificada para entre el 18 y 28 de marzo. Sin embargo, su papá contó que están a la espera de definir la fecha por cuestiones climáticas, ya que hay chances de sudestada.
“Veo la dedicación, el sacrificio, la voluntad que él pone, lo acompaña toda la familia en su entrenamiento, en su lucha, en todo, para nosotros es un orgullo que él pueda realizarlo y acompañarlo, estamos hablando de una de las 10 pruebas más importantes del mundo de este tipo, donde si rompe el récord de edad estaría rompiendo un récord que hace 102 años que no puede batirse, sería el más joven en el mundo, así que imagínate que si estamos orgullosos”, dijo Oscar.
Sabe que ha estado y estará cuidado. El mismo club ha publicado su apoyo expresando que es “el orgullo de Regatas” y que se trata de una verdadera hazaña.
La entidad resalta que a lo largo de 105 años, poco más de 40 valientes han superado este desafío. “Ahora Lautaro busca no solo unirse a este selecto grupo, sino también marcar un nuevo récord como el nadador más joven en lograrlo”, subraya. La nadadora que tiene el récord tenía exactamente 19 años, 10 meses y 13 días.
En el club hacen hincapié en que el proyecto cuenta con una meticulosa planificación que garantiza la seguridad y el éxito de la travesía. “Lautaro está siendo entrenado por el Licenciado Claudio Capezzone, integrante del cuerpo técnico del Club y cuenta con el sólido respaldo de Owa Challenge en Uruguay”, detallan allí. Además, mencionan que contará con el apoyo y la experiencia de dos destacados referentes en la disciplina de aguas abiertas: Gustavo Oriozabala y Damián Blaum.
En aquel entonces, Lilian completó el cruce en 24 horas y 10 minutos. Lautaro contó que luego se superó y el récord de velocidad por ahora está en 8 horas y 50 minutos. “Por ahora el del tiempo no va, no lo estoy mirando directamente, estoy más enfocado en poder terminar la carrera”, apuntó.
Durante la travesía irá acompañado de dos lanchas y requerirá cuidados. “Me hidrato bastante porque el agua va a estar muy caliente, entonces voy perdiendo mucho líquido y también voy comiendo”, contó. Dijo que los alimentos se los acercarán con un palo y consistirán en membrillo, durazno de almíbar, jamón y queso.
La familia contó que es una prueba muy costosa, sobre todo porque hay que solventar las embarcaciones y que lo hacen casi todo “a pulmón”. Por eso, están en la búsqueda de sponsors y han organizado un sorteo para el cual buscan colaboraciones de quienes puedan apoyar la cruzada. Agradecieron el apoyo que les está brindando el club. “Queremos agradecer al cuerpo de entrenadores, Lautaro entrena muchas horas y ellos se van rotando para que siempre él esté cubierto en los entrenamientos, eso es muy importante para nosotros”, destacó el orgulloso papá. Para contactarse puede hacerse al teléfono: 2616510599.
Ante lo que consideran un hito para la natación en Aguas Abiertas, el club destaca que la travesía del Río de la Plata representa una prueba de resistencia extrema.
“En el Club Regatas estamos muy orgullosos de Lautaro y de todo lo que ha logrado. Este desafío no solo es un testimonio de su esfuerzo y dedicación, sino también del compromiso que tenemos con el desarrollo de nuestros atletas. Lautaro está demostrando que el trabajo en equipo, la disciplina y la pasión por el deporte son clave para alcanzar grandes metas. Estamos convencidos de que este cruce marcará un antes y un después en su carrera deportiva”, manifestó su presidente, Jorge Aguirre Toum.
Lautaro contó que aún no ha definido qué estudiará al terminar el colegio. Ha pensado en administración de empresas o la carrera de entrenador. En cuanto a otras pruebas dijo que por ahora no piensa, que está emocionado con lo que tiene por delante y que quizás pueda a fin de este año o el año que viene hacer el Santa Fe-Coronda. También ha pensado en el Cruce de Malvinas y el estrecho de Magallanes, que -aclaró- es una carrera bastante importante.