En una sesión marcada por la necesidad de dar previsibilidad institucional, la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO) aprobó en general su pauta presupuestaria para el ejercicio 2026. La decisión del Consejo Superior se alinea con la reciente aprobación del Presupuesto Nacional ocurrida el pasado viernes 26 de diciembre, la cual sirve como base para el esquema financiero de la casa de estudios.
Si bien el proyecto fue avalado de forma global, el debate en particular de ciertas partidas fue postergado para febrero. Los consejeros coincidieron en que diversos ítems asignados a las líneas estratégicas de la Universidad requieren explicaciones técnicas profundas que no pudieron abordarse debido a la celeridad con la que se trató el presupuesto a nivel nacional.
A pesar de las postergaciones en el análisis de puntos específicos, hubo consenso total en la urgencia de aprobar los fondos destinados al pago de salarios y servicios esenciales. Esta medida busca asegurar que el comienzo del ciclo 2026 sea ordenado y previsible para toda la comunidad universitaria.
De cara al reinicio de actividades en febrero, se acordó que el Consejo Superior analizará minuciosamente el destino de las partidas específicas. Durante ese periodo de discusión, el cuerpo podrá modificar el texto del articulado y la asignación de fondos mediante una mayoría simple.
Al finalizar el encuentro, la rectora Esther Sánchez destacó la importancia de haber alcanzado este acuerdo inicial. La funcionaria agradeció el esfuerzo y la comprensión de los integrantes del Consejo, señalando que esta aprobación general no solo otorga estabilidad interna, sino que representa "un mensaje muy importante a la sociedad a favor del consenso y en defensa de la Universidad pública".