La histórica casona que aún despierta admiración y "terror" en Villa Nueva volvió a hacerse viral en las redes sociales. Es que la mansión Cantú Notti, un gigante arquitectónico construido a principios del siglo XX, está hoy publicada en la web de una reconocida inmobiliaria por 600.000 dólares.
Según repasa el anuncio, son 5.000 metroscuadrados totales y 600 cubiertos, distribuidos en 15 ambientes, seis dormitorios, dos baños, un toilet y dos cocheras. Una propiedad monumental que, pese al abandono, conserva una presencia que impone respeto.
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Gentileza / Remax
“Construida hace más de un siglo. Solía ser uno de los chalets más importantes de su época”, describe la inmobiliaria.
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Gentileza Remax
El estilo ecléctico con predominio de Art Nouveau sigue visible desde la calle Bandera de los Andes al 2.250. Pero lo que deslumbra (y estremece) está puertas adentro en fotos tétricas: muebles viejos y cubiertos de polvo, una biblioteca oscura, cortinas pesadas, paredes que parecen congeladas en el tiempo. Las imágenes recuerdan a un set de película de terror.
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Gentileza / Remax
La historia de la mansión Cantú Notti en Guaymallén
Cuando Carlos Cantú y Felisa Notti levantaron la casa el siglo pasado, Bandera de los Andes era el Carril Nacional, la ruta hacia Buenos Aires antes del nacimiento del Acceso Este. “Era una zona llena de fincas, en las afueras de la Ciudad de Mendoza”, contó la arquitecta Eliana Bórmida, nieta de los primeros dueños, en diálogo con Los Andes. Con el crecimiento urbano, las chacras fueron desapareciendo y la mansión quedó como un testimonio del viejo Guaymallén.
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Gentileza Remax
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Gentileza / Remax
El frente mantiene una de sus mayores rarezas: una escalera hecha con rollizos de falsa madera -en realidad, cemento armado- que lleva a un mirador en el techo. La casa combinaba jardines cuidados, pilares coronados por copones y un portón que conducía a un garaje donde, según Bórmida, aún permanece el Ford 1940 de su abuela.
En su época dorada, un sendero con una fuente decorada con garzas metálicas guiaba hacia una puerta imponente que abría a un hall con living comedor. El techo estaba pintado con figuras de mujeres, cielos y guirnaldas. En el sector principal todavía se conservan empapelados originales. Hacia un lado había un escritorio; hacia el otro, un dormitorio. El baño central es uno de los pocos espacios que aún permite imaginar el esplendor perdido.
Hoy, esas mismas habitaciones lucen vacías, húmedas, fantasmales. Lo que antes fue lujo, ahora es silencio, madera gastada y polvo acumulado.
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Mansión "abandonada" Cantú Notti en Guaymallén
Gentileza / Remax
Los Cantú, inmigrantes italianos, se instalaron en Villa Nueva a comienzos de 1900 y desarrollaron fincas y bodegas. Carlos, además, fue intendente de Guaymallén por la UCR. La mansión fue hogar familiar hasta 1945, cuando él murió y Felisa quedó sola. Con el tiempo, el abandono se volvió inevitable.
En la esquina, por aquellos años, vivía el músico Hilario Cuadros. La zona era escenario de guitarras y reuniones populares. Esa vida de barrio dio origen al nombre de la calle perpendicular ubicada a pocos metros: Cañadita Alegre.