Aunque el frío invita a comer caliente, esta cena sin cocinar ayuda a calmar inflamaciones y puede ser clave para el bienestar diario.
Para reducir las inflamaciones nocturnas de invierno, no hace falta cocinar para una buena cena.
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WEBCuando llega el invierno solo pensamos en cenas calientes y calóricas que reconforten. Sin embargo, existe una alternativa que no requiere cocinary puede resultar mucho más beneficiosa para el organismo. La clave está en elegir los alimentos indicados, capaces de reducir la inflamación sin perder sabor ni saciedad.
Imaginar una cena fría en días fríos parece poco atractivo, pero esta combinación de ingredientes naturales tiene efectos protectores en procesos inflamatorios. Es una opción rápida, sencilla y con respaldo científico que favorece el descanso, mejora la digestión nocturna y puede incorporarse sin alterar la rutina habitual.
Los nutricionistas coinciden en que hay ciertos ingredientes crudos que ayudan a reducir la inflamación en el cuerpo.
El cuerpo siempre pide calor en invierno, aunque lo importante no es la temperatura del plato sino el efecto que produce en el organismo.
Aunque la costumbre indique lo contrario, una cena fría y antiinflamatoria puede ser una gran combinación para tu salud en invierno. Lo importante no es calentar el plato, sino elegir ingredientes que trabajen a favor del organismo, especialmente durante el descanso nocturno.