Las bikinis están en contacto constante con agua salada, cloro, protector solar y arena, lo que puede arruinar la tela y generar malos olores. Si no se lavan bien, pierden elasticidad, color y comodidad. Con una rutina simple, podés mantenerlas limpias, suaves y como nuevas durante toda la temporada.
Dentro de las técnicas de limpieza del hogar más recomendadas, este método ayuda a prolongar la vida útil de las prendas de baño.
1. Enjuague inmediato después de usarlas
Cómo lavar correctamente las bikinis así se mantienen limpias y cómodas (1)
Apenas llegás a casa, enjuagá la bikini con agua fría para eliminar restos de sal, cloro y protector solar. Este paso evita que los residuos se adhieran a las fibras y provoquen manchas o rigidez. Nunca la dejes húmeda dentro de una bolsa por varias horas.
2. Lavado suave a mano, la mejor opción
Llená un balde con agua fría y agregá unas gotas de jabón neutro o para ropa delicada. Sumergí la bikini y masajeá suavemente la tela, sin retorcer ni frotar con fuerza. Evitá el lavarropas: el centrifugado puede aflojar el elástico y deformar la prenda.
3. Cómo secarlas para que no pierdan forma
Cómo lavar correctamente las bikinis así se mantienen limpias y cómodas (3)
Escurrí el exceso de agua presionando la bikini entre dos toallas limpias. Dejala secar a la sombra, sobre una superficie plana o colgada en un lugar ventilado. El sol directo puede desteñir los colores y endurecer la tela.
4. Errores comunes que arruinan las bikinis
No uses lavandina, suavizante ni agua caliente, ya que deterioran las fibras. Tampoco es recomendable plancharlas ni secarlas con calor artificial. Estos errores acortan notablemente la vida útil de la prenda y afectan su comodidad.
Consejo final
Lavá tus bikinis después de cada uso, incluso si solo estuviste un rato en la pileta o el mar. Con estos cuidados simples, se mantienen limpias, cómodas y con buen ajuste, listas para acompañarte todo el verano sin perder calidad.