Los recipientes abiertos en la heladera, alimentos en mal estado o la acumulación de humedad pueden generar malos olores y mantenerla limpia no siempre es una tarea sencilla. Frente a este problema común hay un truco casero, económico y natural, colocar cáscaras de naranja en uno de los estantes.
Por qué funciona el truco de las cáscaras en la heladera
Muchas personas recurren a productos químicos o a los clásicos desodorantes artificiales para refrigeradores. Sin embargo, este truco es muy efectivo por su perfume suave y natural que no enmascara el olor, sino que lo equilibra, dejando una sensación de limpieza y frescura en el ambiente interior del electrodoméstico.
La naranja, además de ser una fruta deliciosa, posee aceites esenciales en su cáscara que liberan un aroma fresco y cítrico. Estos compuestos naturales funcionan como neutralizadores de olores, combatiendo esos aromas molestos que muchas veces provienen de verduras en mal estado, restos de comida o líquidos derramados.
Este truco no solo resulta efectivo, sino que también permite aprovechar la parte de la fruta que habitualmente se descarta. En lugar de tirar las cáscaras, se les da un nuevo uso que contribuye a un hogar más sustentable, reduciendo el desperdicio y reemplazando productos industriales que suelen venir en envases plásticos.