El Hospital Garrahan, uno de los centros pediátricos más importantes del país, atraviesa un conflicto laboral en medio del reclamo salarial de médicos, residentes y personal administrativo. Ante esta situación, el Gobierno nacional anunció que implementará controles biométricos para auditar el presentismo y el cumplimiento horario del personal, al tiempo que evalúa otorgar un “plus por productividad” para incentivar el rendimiento profesional.
Desde el Ministerio de Salud, encabezado por Mario Lugones, descartaron inyectar más presupuesto al hospital. “No se va a financiar la ineficiencia”, señalaron fuentes oficiales a La Nación, que atribuyen el conflicto a un “desorden administrativo” interno. En ese sentido, justificaron la decisión de auditar con mayor firmeza la planta laboral del hospital y enfatizaron: “Los ñoquis se van. La persona que no cumple tareas deja de pertenecer al hospital”.
Reunión bilateral Argentina-Estados Unidos
En ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones, se reunió con el secretario de Salud estadounidense, Robert Kennedy Jr.
X
El Hospital Garrahan, que recibe el 80% de su presupuesto desde Nación, cuenta según datos oficiales con 953 empleados administrativos y 478 médicos de planta. Para el Gobierno, los fondos están, pero quedan atrapados en la burocracia. “Queremos que los recursos lleguen a quienes trabajan bien”, añadieron a La Nación.
A pesar del aumento del 244% en el presupuesto de gasto corriente en 2024 —que pasó de $48.000 millones a $165.000 millones—, los profesionales denuncian sueldos congelados: los médicos residentes aseguran ganar $797.061 mensuales por más de 60 horas semanales, lo que impulsa un éxodo hacia el sector privado, donde los ingresos pueden duplicarse.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, reforzó el mensaje del Gobierno en conferencia de prensa. Aseguró que el Garrahan tiene hoy equilibrio financiero tras una década de desmanejo y criticó los nombramientos jerárquicos de gestiones anteriores. “Hoy hay dos empleados administrativos por cada médico”, afirmó.
El vocero presidencial Manuel Adorni
El vocero presidencial Manuel Adorni
Captura de video
Desde el gremio ATE, el delegado Esteban Argañaraz acusó a Adorni de “mentir” por la cuenta de X (Twitter), y presentó cifras que contradicen al Gobierno: 3190 trabajadores del área asistencial frente a 957 de logística y 581 de conducción.
Como parte de la negociación abierta tras la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo, los residentes solicitaron una reunión formal con el Ministerio de Salud, que se concretó este mediodía en la sede ministerial.
Mientras tanto, el Ejecutivo sostiene que ya se otorgaron algunos incrementos, como un plus del 15% por atención de alta complejidad y un aumento en la hora de guardia de $8000 a $9600. A su vez, analiza la implementación de un “plus por productividad”, aunque no se detallaron aún los criterios para aplicarlo.
El Ministerio también defendió su gestión al introducir un manual de buenas prácticas, que habría reducido los gastos en seguridad y medicamentos mediante licitaciones más eficientes. El próximo paso será focalizarse en el control de personal, como parte del objetivo de “sustentabilidad” del Garrahan.
A pesar del recambio de autoridades en el Consejo de Administración —que ahora preside Soraya El Kik junto a Jorge Menehem y Roberto Dalmazzo— el conflicto sigue vigente. El Gobierno asegura que los médicos que se van están siendo reemplazados, aunque evita aplicar el mismo criterio con los empleados administrativos.