Partidos de izquierda se manifestaron en el microcentro mendocino en contra de la reforma previsional, que se tratará hoy en el Congreso de la Nación, en medio de un gran operativo policial.
Partidos de izquierda se manifestaron en el microcentro mendocino en contra de la reforma previsional, que se tratará hoy en el Congreso de la Nación, en medio de un gran operativo policial.
Los manifestantes cortaron la calle Colón y desde la Municipalidad de Capital confirmaron que los multarán con 46.000 pesos por no cumplir el Código de Convivencia.
La reforma previsional -que tiene como punto más polémico el cambio de fórmula para actualizar los haberes jubilatorios, que supondrá menores aumentos en los próximos meses- ya tiene la media sanción del Senado y logró dictamen de comisiones de Diputados el martes pasado.
La reforma previsional que impulsa el Gobierno impactará en la vida cotidiana de los jubilados, dado que sus haberes subirán a marcha más lenta que en la actualidad y por ello no podrán incrementar sus gastos de forma real sino sólo ajustando por inflación.
El problema está en que la canasta de consumo de los jubilados es más cara que la del resto de la sociedad porque que gastan hasta el 90% de sus ingresos en alimentos y medicamentos, los rubros que más vienen encareciendo el costo de vida general.
Un estudio del Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) indica que la inflación de los jubilados estuvo dos puntos por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC) general en 2016 y 2017.
La confusión sobre si ganan o pierden con la reforma se genera porque si bien los jubilados dejarán de percibir unos 100.000 millones de pesos por el menor aumento con la nueva fórmula, ese dinero no será ahorrado por el Estado: se pagarán reajustes por exigencia judicial y se seguirá devolviendo a las provincias la detracción del 15% de la precoparticipación que iba a la Anses.
“¿Cuánto cobrará un jubilado en marzo?”, se le consultó el lunes en el Congreso a Nicolás Dujovne.
El ministro de Hacienda no supo qué responder y reconfirmó las dudas a un sector de la oposición acerca de que con esta reforma los jubilados pierden.
Ayer, Dujovne dijo que las jubilaciones subirán “un 22% en 2018”, a lo que habrá que descontarle la previsión de 16,6% de inflación que tiene el sector privado según la encuesta del Banco Central.
“Eso da un aumento real del 5%”, dijo. Y en 2019 -amplió el ministro- el aumento real será del 2 %.