En medio de una noche fervorosa a nivel nacional para el mileísmo, el triunfo logrado en Mendoza por el eje Petri-Cornejo no sólo ratificó largamente las tendencias de los últimos meses. También convierte a esta provincia en una de las fortalezas políticas del gobierno nacional.
La euforia del Gobernador en su condición de último orador del festejo de anoche fue demostrativa de ello: “Agradecemos a los mendocinos, porque necesitábamos este respaldo”. “Hemos leído correctamente este momento histórico: mantener el rumbo para obtener resultados positivos para Mendoza y el país”.
Claramente hay en la provincia dos personajes ganadores. En el plano nacional el todavía ministro de Defensa, que llegará al Congreso con galardones bien ganados en la elección de su propio terruño. Y hacia adentro de Mendoza el gran ganador es el gobernador Cornejo, que jugó a favor del acuerdo y logró un armado de listas para la Legislatura que le da un respetable respaldo para que su gestión no tenga mayores sobresaltos en la segunda parte.
Se puede considerar que una vez más la fuerza de tracción de los intendentes le dio al oficialismo provincial parte del resguardo que esperaba en las urnas. Mantener unificado el calendario electoral en departamentos como Capital, Godoy Cruz, Guaymallén, Las Heras y parte del Este provincial le aseguraba al gobierno de Cornejo un mayor traslado de la intención de voto a los candidatos a legisladores, la parte vital de la elección de ayer. Los números que arrojó el escrutinio fueron clarísimos: una cantidad mayoritaria de mendocinos optó por la lista completa.
Por otra parte, el reconocimiento de anoche de Cornejo a los intendentes y a la militancia, la primera mención en su discurso, es el justo premio para lo que el Gobernador siempre ha considerado engranajes de sus éxitos electorales.
La cantidad de bancas que renovaba el cornejismo tanto en Diputados como en Senadores era bastante importante. Por ello la preocupación para que el voto distrital no se dispersara y apoyara, como evidentemente lo hizo una vez más, a los candidatos a ocupar esos lugares.
De ahora en más tendrá el oficialismo provincial el tiempo suficiente para ajustar mecanismos; estas bancas se renovarán recién en mayo del año próximo. Varios meses en los que seguramente se observará qué solidez mantiene la alianza surgida entre la UCR provincial y La Libertad Avanza. Vínculo que siempre repercutirá en el Congreso, donde los gobernadores influirán en base a los acuerdos que seguramente buscará desde ahora el gobierno nacional para intentar apurar las reformas estructurales que pretende encarar y poner en marcha en el segundo tramo de gestión. Justamente, anoche, en el discurso del festejo libertario, en la ciudad de Buenos Aires, el presidente anunció que convocará a los jefes provinciales a participar de la discusión de los proyectos que propondrá su Gobierno.
La amplia diferencia porcentual que se registró ayer opacó el repunte del peronismo mendocino, que no obstante ello mejoró notablemente con respecto a la pobrísima elección de 2023. Esto no significa que el resultado obtenido en esta oportunidad mereciera un festejo, que no existió, claro. Pero le sirve al PJ para seguir siendo en la Legislatura la principal fuerza de oposición al radicalismo de Cornejo.
Seguramente, llegue otro tiempo de replanteos en el PJ, tal vez como reflejo de una discusión que también puede sobrevenir a nivel nacional, en especial luego de la caída que tuvo el kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires en poco menos de dos meses.
El resto de los espacios con representación parlamentaria en Mendoza dependerá de la reorganización que muchos de esos partidos seguramente deberán encarar después de los bajos resultados de ayer.
* El autor es periodista. [email protected]