Una escena de extrema violencia sacudió este sábado al noreste de Brasil, donde un choque frontal seguido de un incendio terminó en una tragedia que dejó al menos once personas muertas, entre ellas dos niños pequeños y una mujer embarazada.
Ocurrió en la ruta federal BR-101, al sur del estado de Bahía. Algunos cuerpos serán sometidos a exámenes de ADN para su identificación legal. Cuál fue la principal hipótesis.
Una escena de extrema violencia sacudió este sábado al noreste de Brasil, donde un choque frontal seguido de un incendio terminó en una tragedia que dejó al menos once personas muertas, entre ellas dos niños pequeños y una mujer embarazada.
El siniestro ocurrió sobre la ruta federal BR-101, a la altura del km 953, en cercanías de la ciudad de Mucurí, ubicada en el extremo sur del estado de Bahía. Allí colisionaron de frente una camioneta Chevrolet S10 y un utilitario Fiat Dobló, por causas que aún son materia de investigación.
Según confirmaron las autoridades locales y la empresa concesionaria Ecovias Capixaba, diez personas murieron en el lugar a raíz del violento impacto, mientras que una undécima víctima falleció horas después en un centro de salud, debido a la gravedad de las lesiones sufridas.
Según informó la Policía Federal de Caminos (PRF), chocaron de frente y se incendiaron por completo de manera inmediata. El fuego, al envolver a ambas unidades, se dificultaron las tareas de rescate y demandó un intenso despliegue de los bomberos y fuerzas de seguridad.
La ruta permaneció totalmente cortada durante varias horas mientras se realizaban los trabajos de remoción de los vehículos y los peritajes correspondientes para determinar la mecánica del accidente.
De acuerdo con los primeros informes policiales y versiones de medios locales, la principal hipótesis que manejan los investigadores apunta a que uno de los conductores realizó un “intento de sobrepaso de manera indebida”, lo que habría derivado en el choque frontal.
La violencia del impacto y el posterior incendio dejaron los cuerpos en un estado tal que, según trascendió, algunos deberán ser sometidos a exámenes de ADN para su identificación legal.
Fuentes regionales informaron además que varias de las víctimas pertenecían a un mismo grupo familiar. En medio del desolador escenario, se reportó que una persona logró sobrevivir a la colisión, aunque permanece internada en grave estado y con pronóstico reservado.