El argentino Marcelo Crovato, abogado detenido en Venezuela desde 2014 por razones políticas, logró escapar ayer del país gobernado por Nicolás Maduro. Cruzó a Colombia, junto a su pareja Elly Arrellano y sus dos hijos.
El argentino Marcelo Crovato, abogado detenido en Venezuela desde 2014 por razones políticas, logró escapar ayer del país gobernado por Nicolás Maduro. Cruzó a Colombia, junto a su pareja Elly Arrellano y sus dos hijos.
La diputada nacional del PRO y presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, Cornelia Schmidt, confirmó la noticia a través de las redes sociales. Ella había solicitado en febrero pasado la libertad de Crovato al embajador venezolano en Atrgentina, Carlos Martínez Mendoza.
"¡Una gran alegría que junto a tu familia puedas respirar aires de libertad!", le escribió la legisladora en Twitter, a lo que él contestó: "Cuando crucé lo primero que hice fue voltear hacia Venezuela, renovar la promesa y saludar con la seña scout, comprometido a servir a la Patria. Mi promesa está viva, scout por un día y para siempre, como me enseñaste. Siempre listo", publicó el argentino.
En declaraciones a diario La Nación, Crovato manifestó su felicidad porque "estar libre", pero reconoció "estar triste por todo lo que quedó atrás". El hombre había sido detenido en 2014 tras colaborar con el Foro Penal y otras organizaciones de derechos humanos que asistían a los jóvenes detenidos en las protestas contra el régimen venezolano.

El 22 de abril de 2014, hace casi cuatro años, el abogado argentino recibió una llamada de una familia que estaba siendo allanada por la Policía de Venezuela en el barrio Chacao, de la zona este de Caracas. Fue a asistir a esa familia de forma jurídica, pero los agentes de seguridad lo detuvieron y quedó tras las rejas acusado de asociación para delinquir, obstrucción de vía pública, desobediencia de las leyes e intimidación pública.
Amnistía Internacional fue uno de los organismos que exigió su liberación, pero de nada sirvió. Incluso, el argentino atravesó varios problemas de salud que lo llevaron hasta un intento de suicidio. Luego, desde febrero de 2015, Crovato cumplió arresto domiciliario.
Tres años después, puso fin a sus tribulaciones con su huida a Colombia, desde cuya capital planea regresar a la Argentina.